La violencia no da tregua en Socio Vivienda 2, un plan habitacional ubicado en el noroeste de Guayaquil, dentro del denominado distrito Nueva Prosperina, considerado el segundo más peligroso del país, solo después de Esmeraldas, de acuerdo a registros oficiales, entre enero y agosto de 2022.

Pero los primeros puestos de violencia no es lo único que comparten estas jurisdicciones, sino también las agrupaciones delictivas que se han asentado para generar terror: Los Tiguerones y Los Lobos. Estos grupos son aliados, según fuentes policiales.

En Socio Vivienda 2 es común observar paredes con grafitis y leyendas que hacen alusión a estas bandas, que empezaron a tomar fuerza tras su separación de Los Choneros, a inicios de 2021, como ha publicado EXTRA en investigaciones anteriores.

Los lugareños, atemorizados, relatan que las balaceras se dan a diario, sobre todo en horas de la noche, tal como ocurrió el martes 30 de agosto. “Escuchábamos unas ráfagas y después de una media hora, otra vez empezaban. Así pasó tres veces”, recuerda una comerciante de Socio Vivienda 1, pues hasta ese sector se podía oír el tiroteo.

Sin embargo, el sonido no fue lo único que viajó a esa distancia, sino también las proyectiles, pues al menos uno llegó hasta el sector Lomas de la Florida, donde un niño, de 10 años, resultó herido a causa de una munición.

El padre del pequeño confirmó a los investigadores que luego de escuchar los disparos notó que su vástago había resultado herido e inmediatamente lo llevó hasta un hospital cercano, donde se mantenía estable, pero bajo cuidados médicos.

‘Cayeron’

En la zona del suceso también había agentes que hacían un control y ejecutaron un operativo para encontrar a los responsables del tiroteo, que se habría suscitado a pocos metros de una unidad policial.

Fue así que llegaron hasta las casas donde presuntamente se escondían cuatro sospechosos, identificados como Maikel Rentera Ramírez, Gabriel Estrada Borja, ambos de 19 años, Carlos Pincay Castro, de 21, y Rider Zambrano Macías, de 29 años. Los dos últimos constaban con prontuario delictivo.