Los parientes de Melanie Calvopiña llegaron a la morgue de la Policía, noroccidente de Quito, para retirar su cuerpo. Ayer conversaban entre ellos, mientras esperaban completar los trámites luego de que fuera, supuestamente, asesinada por su pareja.

La víctima, quien había cumplido 18 años en junio pasado, fue hallada muerta junto a su conviviente, identificado como Kevin Jami, en un departamento del barrio Hospital, ubicado en el sur de la capital.

Eran las 08:30 del 28 de noviembre, cuando Jami se percató de que Calvopiña no se movía. Ante esto, él había intentado reanimarla y le dio respiración boca a boca, pero no respondía, según el informe policial.

En ese momento llamó al número de emergencias, de donde se envió a un equipo de socorro. A su llegada revisaron a la joven, pero confirmaron que había muerto.

Un caso violento

La paramédico que inspeccionó el cadáver llamó a la Policía, cuyo equipo de investigación arribó a las 09:30 y fue informado de lo ocurrido: el deceso no se dio por causas naturales, ya que Calvopiña tenía golpes y hematomas, a decir de la rescatista.

¿Qué pasó? Jami les dijo que ambos estaban bebiendo desde la noche del domingo. Cuando eran las 06:00 del lunes, él junto a un sobrino llevaron a la joven hasta la habitación para que descansara.

“Pasaron 20 minutos y mi pareja comenzó a discutir. Le propiné un puñete en la nariz de la cual le salió sangre. Se limpió y nos fuimos a descansar”, relató el sospechoso a los agentes.

Detenido

El cadáver quedó tendido en la cama donde minutos antes la joven se recostó. Al confirmarse la forma de la muerte, Jami fue detenido por los policías y llevado hasta el Complejo Judicial de Quitumbe, en el sur de la ciudad. Hasta ayer se esperaba el resultado de la audiencia, pero de manera extraoficial se conoció que el hombre fue enviado a prisión.

Pasado el mediodía de este martes, el cuerpo fue entregado a los parientes, quienes decidieron no dar detalles de la vida de su ser querido.