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El sargento segundo José Enríquez Elizalde fue trasladado con pronóstico reservado hasta Guayaquil.Tatiana Ortiz

Babahoyo: Le robaron el arma a policía herido

Uno de los uniformados atacados en el cantón Jujan está delicado de salud por un balazo en la cabeza

Marco Antonio Enríquez frotaba sus manos y se las llevaba a la cabeza al ver a su hermano José Enríquez Elizalde en estado crítico, producto del disparo que recibió en la cabeza mientras cumplía sus labores policiales en el cantón Alfredo Baquerizo Moreno (Jujan), provincia del Guayas, la noche del miércoles 3 de agosto de 2022.

El sargento segundo y el cabo segundo de la Policía Lucas Osorio Bajaña fueron sorprendidos a bala por los ocupantes de un automóvil gris que se aproximó a la patrulla estacionada a pocos metros de una estación de servicio.

Marco Antonio se enteró del ataque porque desde la entidad avisaron a su cuñada (esposa de José), quien se encuentra en el extranjero. El pariente viajó hasta Babahoyo, en la provincia de Los Ríos, y supo que su ñaño estaba en estado crítico. El herido fue llevado a Guayaquil.

Al hospital de la capital riosense también llegó José Bajaña, tío del otro agente, Lucas, quien se encuentra estable, pero también fue trasladado a la urbe porteña.

Las dos ambulancias salieron a las 02:30 de este jueves 4 de agosto, de la ciudad fluminense, con el resguardo policial del Grupo de Operaciones Especiales (GOE).

Fuera de la ambulancia, Marco Antonio Enríquez, hermano del sargento José, rogaba por la salud de su hermano.Tatiana Ortiz

Los allegados de Osorio, conmovidos por lo ocurrido con su familiar, pidieron al Estado garantías para los agentes. “Estamos en una situación crítica. Ahora cogen y matan a cualquiera y nadie dice nada. Queremos más seguridad”, cuestionó el tío del herido.

EL ATAQUE

El ataque quedó grabado en una cámara de una estación de servicio. El video muestra cómo los criminales dispararon hacia la patrulla y los agentes intentaron resguardarse, pero fueron alcanzados por los proyectiles.

Lucas se bajó del patrullero y avanzó hasta un minimárket cercano, con heridas en el hombro y antebrazo derechos.

Sin embargo, José, cuando puso un pie fuera del vehículo, se desplomó inmediatamente por un disparo en la cabeza.

Desde el interior del local, Lucas intentó repeler el atentado.

Cuando los disparos cesaron, uno de los antisociales desarmó a Enríquez y se presume que también lo despojó de su teléfono celular. Luego huyeron.

La patrulla en la que estaban los agentes brindando resguardo, también tiene huellas de disparos.Tatiana Ortiz

Buscar motivos

Para Fernando Carrión, analista en seguridad, cuando ocurren ataques de este tipo hay que tomar en cuenta dos panoramas. El primero es saber si los agentes que sufren sicariatos están realizando algún tipo de investigación delicada. “Si es así, la institución debería proporcionarles la seguridad necesaria”, acotó.

Aunque también se tiene que analizar el segundo escenario: si los policías que son asesinados son malos elementos. Es decir, si un atentado de ese calibre se debe a un ajuste de cuentas por actividades ilícitas, indicó Carrión.

"Cuando se dan estas situaciones con los policías, se tienen que analizar dos panoramas”, Fernando Carrión, experto en seguridad
.
"Se registró el robo del arma, pero no descartamos otro dato que arrojen las investigaciones”, Marco Proaño,
jefe de Dinased
.

El ataque fue dirigido, según comandante

El comandante de la Zona 5 de la Policía, Julio Miño, mencionó que el ataque a los dos servidores policiales que patrullaban en el ingreso a Jujan “fue dirigido”.

Con las primeras indagaciones realizadas en el lugar, se descartó un intento de asalto a la gasolinera o al minimárket.

Según el coronel Miño, los sujetos llegaron directo a disparar a los uniformados. Al sargento José Enríquez le propinaron un balazo en la cabeza que lo dejó imposibilitado de reaccionar.

El compañero y conductor del patrullero, Lucas Osorio Bajaña, logró ponerse a buen recaudo y pese a los balazos que recibió en el brazo y antebrazo, se defendió de los atacantes.

Uno de los hombres que participó en el ataque aprovechó que Enríquez estaba sobre la calzada desangrándose y le arrebató el cinturón con el arma de dotación.

El teniente coronel Marco Proaño, jefe de la Dinased Subzona Guayas, también reafirmó que en uno de los videos revisados “se ve a tres hombres utilizando armas largas y cortas, quienes llegan en un automóvil directamente a disparar a los compañeros”.