“Cuando mi vecina y yo estábamos llegando a la escuela para recoger a los niños, oímos la balacera y nos tiramos al suelo”, dijo Consuelo a los agentes de Balzar, quienes investigan el asesinato de Henry Cobeña, el cual se perpetró a pocos metros de un plantel, ubicado en la calle Víctor Manuel Rendón, del mencionado cantón del Guayas.

Cobeña conducía un camión el mediodía del 13 de febrero y de repente dos sujetos en moto lo interceptaron y le dispararon en la cabeza, tórax y espalda, quedando sin vida recostado en el asiento del copiloto.

Los sicarios fugaron con dirección al centro del cantón, ante la mirada atónita de varios padres de familia.

Agentes de las Unidades de Criminalística y Muertes Violentas (Dinased) del Empalme, hasta el mediodía del 14 de febrero, explotaban cámaras de seguridad para dar con los asesinos, quienes fueron directo a su objetivo. “Los cinco disparos quedaron impregnados en el parabrisas del lado del conductor", aseveró un agente policial.

Un verdadero drama se vivió, cuando los familiares del fallecido, reconocieron a su ser querido, ante el dolor que los embargaba evitaron dar declaraciones a los medios de comunicación.

“Al parecer, iba a retirar a sus hijos de la escuela, cuando lo mataron”, comentó un amigo de la víctima.

El mayor Mauricio Alay Romero y su personal de Policías del Servicio Preventivo realizaban varios allanamientos para dar con el paradero e identidad de los gatilleros, quienes presuntamente estarían implicados en los dos últimos crímenes, registrados la semana pasada, en la cabecera cantonal y bajo la misma modalidad.

Rocío Mora, comerciante del cantón, manifestó a EXTRA que no se sabe por qué hasta el momento el alcalde Álex Zambrano Alcívar no declara al cantón en emergencia. "Desde el año pasado, los sicariatos no han parado en nuestra tierra natal y siguen en aumento".

El Mayor Romero confirmó que Cobeña, de 37 años de edad, no registra antecedentes penales y no se robaron nada.

En la escena del crimen se recogieron 10 casquillos percutidos 9 milímetros, porque lo que se presume que se usó una pistola automática. "Esta muerte fue selectiva", acotó el comandante Romero.