Hicieron todo lo que estuvo en sus manos para superar a un ex: tomaron terapia, oraron a Dios, se llenaron de fuerzas para no escribirles, mantuvieron cero contacto... y ahora dicen que es cosa del pasado. Todo esto, luego de saber que la cantante colombiana Shakira está pasando por ese mismo ‘duelo’ que ellos tras su ruptura con el futbolista Gerard Piqué. Es que recientemente ella publicó en redes sociales una especie de carta para recibir el 2023, en la que asegura que aún las heridas están abiertas.

Talentos de la farándula nacional cuentan, desde su experiencia, cómo vivieron aquel proceso, muy similar al de la intérprete de ‘Monotonía’. Incluso, se animan a revelar sus estrategias.

Ya ni se habla con su ex. Han pasado seis años de aquella relación tóxica de la que se liberó la influencer Carolina Romo. Tan tormentoso se tornó el asunto, que superarlo se convirtió en una tarea complicada.

“Fue muy difícil superarlo por lo mucho que había sufrido dentro de la relación. En este proceso tuve que tomar terapia psicológica, lo cual me ayudó mucho a recuperar mi autoestima. Aparte me enfoqué en trabajar para pagar la tesis de mi carrera y comencé a ir al ‘gym’. Subí de peso y mi autoestima mejoró”, narra la también reina de belleza.

Pasó muchos altibajos antes de enfocarse netamente en ella. “Luego de tres años de haber sanado mi corazón y mi alma conocí a mi actual pareja (el influencer Blad Rhoy) y pude darme otra oportunidad en el amor”.

Actualmente ha formado una familia con él y tienen un bebé. Ambos se dedican a crear contenido de bromas y en muchas ocasiones incluyen a sus amigos y familiares.

Carolina dice que la vida no acaba con un mal amor, pues siempre vienen más oportunidades y alguien mejor.

A los 22 años hubo una persona que marcó la vida de la presentadora, pues él ya rondaba los 35.

“Aún era muy inmadura. Al principio fue una relación muy linda, me sentía querida, segura, pero no era la realidad. En ese tiempo yo trabajaba en un canal y cumplía las horas establecidas, y él viajaba mucho por cuestiones laborales también, pero en cada viaje me engañaba, hasta que al fin terminamos”, narra la pelinegra de 27 años.

Le costó soltarlo porque creía que lo ‘amaba’ y lo único que le ayudó en ese proceso fue la oración, pues es muy religiosa.

“Oraba todas las noches y conversando con Dios le pedía por la felicidad de él, no por la mía. Insisto, yo era una niña aún. Gracias a eso solté, maduré y aprendí. En 2019 terminé esa relación que, para mí, fue la que más dolió y en la que más aprendí. Pero no la cambiaría, la necesitaba para madurar y crecer emocionalmente”.

Él la buscó en diversas ocasiones, pero cuando ella cierra una puerta, no la vuelve a abrir.

“Cada uno empezó relaciones nuevas. Ya han pasado algunos años, pero en mi cumpleaños del año pasado lo encontré en el mismo restaurante; solo nos sonreímos de lejos. Así mismo, en diciembre del año pasado lo encontré en una disco, pero no hubo conversación; solo una sonrisa a la distancia”.

Para el ex chico reality, lo más importante en la ruptura sentimental es aceptar que la relación se acabó, poner en una balanza si es que dicha persona suma o no en tu vida, peor aún si pasó algo grave o doloroso.

“Cuando aceptas que la etapa culminó, empiezas la recuperación, pero si estás en la negación jamás vas a poder superar esa etapa; mucho menos aprender y en el futuro tener una relación sana con alguien que esté sano y aspire a algo bonito”, reflexiona.

Ricardo aconseja que debemos aprender a superar etapas porque luego mantenemos los mismos patrones de conducta y buscamos personas con defectos, traumas y las mismas características que lastimaron en el pasado, entrando en un círculo vicioso de errores con parejas. “Lo digo por experiencia, me pasó dos veces con mis parejas, pero decidí romper esos patrones y culminar ese ciclo. Es de los dolores más grandes, duele mucho; pero hay que tomar fuerzas y valor, porque la vida sigue. Cuesta mucho abrir los ojos y cortar todo lo que te ata a esa persona”.

Hace un año y dos meses, la actriz pasó por una ruptura muy dolorosa, porque mantuvo un noviazgo de tres años, incluso vivió con él. “Tuve ataques de pánico, de ansiedad, no podía dormir. Tuve que ir a terapias, busqué ayuda y empecé a hacer cosas que me gustaban, como ir a clases de baile, canto, dibujo... coloreaba cada vez que estaba triste. Expresé mis emociones porque lo peor que uno puede hacer es retenerlas y reprimirlas. Todas las emociones hay que transitarlas para sanarlas”, recuerda.

Valentina dice que el proceso fue difícil, pero aprendió a valorar su compañía. Ella es venezolana y el perderlo la hizo sentirse sola en Ecuador. Por eso, la soledad la afectó más que cualquier otra cosa.

“Seguimos en contacto porque yo me quedé con el gatito y él con la perrita y a veces nos escribimos para cuidarlos cuando salimos de viaje. Siempre será una persona a la que le tendré cariño, porque fue mi primera relación larga”, añade la joven.

Menciona que no cree que el tiempo lo cure todo. Por eso recomienda trabajar las emocionas para sanarlas y continuar adelante de una manera distinta y correcta.

El proceso de superar a un ex es distinto para cada persona y situación. En el caso de la modelo estadounidense, lo mejor que hizo fue enfrentar sus sentimientos, aceptar el dolor y cortar el contacto. También mantener la mente ocupada con cosas sanas, para no entrar en depresión.

“El tiempo es la única cura y cada ruptura tiene su tiempo respectivo de superación. En mis 33 años, he tenido varias rupturas que me afectaron en una manera fuerte. Sin embargo, lo que más me marcó fue mi divorcio (con el presentador Carlos José Matamoros) y aceptar la realidad: que no existía un futuro”, revela.

Para superar y lidiar con el proceso de duelo, siempre tenía la costumbre de esconderse en el trabajo, donde estaba rodeada de amistades y pasaba ocupada. Trataba de no andar en su celular, ni dar mucha atención a las redes sociales.

“Pasé muy frágil emocionalmente y entré en una depresión fuerte. Analizaba cada cosa que había pasado en la relación. La superación llega cuando una acepta la realidad y quiere algo diferente por su vida. Si una persona te deja ir, es porque no es su sitio”, aconseja.

Pasó hace cinco años y en la actualidad no se hablan. Christina explica que el tema de la amistad o contacto tiene mucho que ver con la causa de la ruptura y el tipo de persona que es el ex.

“Tengo amistades con anteriores parejas y se han convertido en buenas influencias en mi vida. Pero como digo, eso solo puede pasar cuando realmente no existen sentimientos de por medio y ha pasado tiempo para curarse”.