Ser princesita de Navidad es el deseo de algunas niñas en épocas como esta, aunque varias famosillas de la farándula nacional no guardan necesariamente buenos recuerdos de aquella faceta que vivieron en su momento.

Algunas se emocionan al recordarlo, pero otras se amargan al rememorar que terminaron llorando porque fueron obligadas por sus madres a participar en estos concursos infantiles.

EXTRA desempolvó los recuerdos navideños de la infancia de actrices, presentadoras y modelos, llenos de amor y mucha nostalgia.

Jomahira Ganchozo, actriz

Un vestido color rojo que no le gustaba, unos zapatos blancos y una diadema con brillos, fue el look que lució Jomahira Ganchozo cuando se convirtió en Princesita de Navidad de su centro de estudios.

No recuerda la edad que tenía cuando ganó el concurso, cree que fue cuando tenía 10 años. Lo que no olvida es que ese día lloró porque no le gustaba vestirse así.

“Nunca me agradaron esos concursos, peor de adulta, aunque si en la actualidad me invitan a participar a uno quizá lo haga, tendría que pensarlo”, justifica entre risas la también presentadora de programas de farándula. 

Samantha Grey, actriz

La actriz Samantha Grey fue Princesita de Navidad en Durán, cerca de la casa de su abuelita, pero no tiene muchos recuerdos de esa ocasión, pues estaba pequeña. Sabe que no fue por voluntad propia.

“Eso pasó cuando no decidía porque era una niña. A mi mami le encantaban esas cosas de concursos”, detalla la también bailarina.

No le gustan los reinados porque está ‘paniqueada’ por los estereotipos de belleza que existen.

“Admiro a quienes lo hacen porque se necesita mucho temple para pararse frente a todos”, menciona. 

Michela Pincay, presentadora

Tenía 3 años y cursaba el jardín de infantes, en una escuelita de la provincia de Manabí, cuando Michela Pincay tuvo su experiencia con un reinado.

Ingresó al concurso para ser una hada de Navidad porque su mamá la metía en todas las actividades de la escuela y porque veía potencial en ella.

“Estaba súper empoderada en el escenario, lanzaba besos en el desfile, caminaba muy segura. Era súper extrovertida. Mi mamá era mi fanática número uno. Fue muy bonito”, cuenta la presentadora del matinal De Casa en Casa, de TC. 

Romina Calderón, presentadora

Cuando le mencionan la palabra Navidad a la presentadora Romina Calderón se emociona. Recuerda con alegría el calor y unión familiar en aquellas festividades.

La época de la escuela y colegio fue la mejor, dice la joven. Casi siempre concursaba para ser la Princesita de Navidad. Y ganaba, pues su carisma y desenvolvimiento la ayudaban.

“Mis hermanos mayores siempre me apoyaban con barra. Estudiamos todos justos; ellos en la secundaria y yo en la primaria”, cuenta entre risas Romina.

En dichos concursos su mamá era la encargada de arreglar su ‘pinta’. Ella seleccionaba el vestido y maquillaje que utilizaría.

Agrega que siempre eran reñidas las competencias, pues participaba una seleccionada por cada curso. “Lo que más recuerdo eran los nervios que sentía, pero cuando uno es más pequeña no siente eso de querer ganar, sino en pasarla bonito”, menciona. 

Grace Castro, presentadora

Desde el jardín de infantes, Grace Castro fue elegida Princesita de Navidad.

La animadora de televisión recuerda que su mamá la ayudaba a elegir el vestido y el peinado, aunque era una pesadilla cuando le arreglaba el cabello porque le estiraba todo el rostro.

“Recuerdo estas fechas con mucho amor y unión familiar. Ser princesita es algo que se atesora de niña. Siempre me gustó”, señala la también exchica reality.

Asegura que volvería a participar como princesita cuantas veces la inviten, pues disfruta esa faceta de maquillaje y pasarela.

Fabiola Véliz, presentadora

Aunque no concursó para ser princesita, la presentadora Fabiola Véliz cuenta que nunca le faltaron ganas para serlo y más aún cuando estaba en la escuela. Era uno de sus anhelos.

Y para cumplirlo su familia tenía que hacer un fuerte gasto económico, pero sus padres no podían ayudarla.

Tenía 6 años y su abuelita Enue Jurado no la quería ver triste, por eso le hizo una cinta de princesita navideña con el rollo de papel higiénico. La ‘guapeó’ e hizo desfilar por toda la casa y su público fue la familia.

“Se me salieron las lágrimas al acordarme. Hace años no lo recordaba y fue lindo hacerlo”, menciona emocionada Fabiola.

Ahora atesora aquel día, pues su abuelita falleció en 2019. La presentadora dice que jamás olvidará todo lo que ella hizo para verla sonreír, hasta el último de sus días.

Mishelle Álvarez, modelo

La modelo Mishelle Álvarez, más conocida como Sirenita, recuerda que fue Princesita de Navidad en la escuela. Lució un hermoso vestido rojo que le compró su familia.

“Para celebrar me hicieron una reunión porque gané. Es lindo recordar ese tiempo. Estaba hermosa y todo el lugar estaba decorado con la época navideña”, narra la joven.

Agrega que fue la única ocasión que participó. Tampoco quiso serlo en la adolescencia, pues su estatura no le ayudaba. Tampoco le llamaba la atención, ni era su sueño.

“Soy bajita, mido 1,62. En la actualidad solo aceptaría dependiendo del lugar al que me llamen para ser princesita y si hay una buena propuesta porque así nomás no iría”, detalla.