No le gusta que le digan Ignacio porque siente como si lo estuvieran regañando. Es Nacho Cheddar y asegura que en el reality de baile ‘Soy el mejor’ está teniendo un gran momento, luego de haber pasado tres años con depresión por la falta de trabajo.

El participante tiene 27 años, pero cuenta que le gusta “mentir” y decir que está en los 21. Le encanta bailar y siempre tuvo claro que quería ser artista, aunque su padre, el actor y director Paco Cuesta, en principio no estuviera de acuerdo.

En la sangre

“Mi papá no quería que yo actúe, quería que sea abogado, doctor o arquitecto, pero yo siempre quise ser artista, así que se dio cuenta de que no podía ir contra la corriente y decidió apoyarme”, explica.

Confiesa que la actuación está en su sangre. “Actuar ha sido algo tan cómodo, lo hago desde los 6 años, por mi papá y mi mamá (Penélope Lauret) que también fue actriz”.

Ahora bailando

“Después que terminé mi participación en La Trinity, me quedé sin trabajo. Para el 2019 había una novela en Ecuavisa en la que me gané el protagónico, pero llegó la COVID y se la canceló”.

Desde aquel año, Nacho sufrió una crisis depresiva, pero no por eso dejó de seguir tocando puertas.

“Ahora que estoy en ‘Soy el mejor’ y me levanto cada día con una sonrisa. Es una experiencia que me la estoy gozando y ha sacado mi mejor versión”.

Fortalecido

Nacho recalca que se siente fortalecido y le parece mentira que alguna vez haya sido víctima de acoso escolar. “Era muy flaquito, pequeño y siempre sonriente. Me encerraban en el baño y me empujaban. No había información sobre bullying y no sabía cómo defenderme”.

Pero asegura que actualmente su historia es distinta. “Me siento empoderado. De esos malos momentos aprendí y los uso a mi favor”.

Identidad y homenaje

No usa el apellido Cuesta, pues indica que siempre quiso tener un nombre artístico desde que estaba en el colegio y se hacía llamar Nacho con Queso. “No es que no me guste mi familia o que quiera ocultarla, mas quería tener mi propia identidad”.

Nacho Cheddar fue sugerencia de su amigo Andrés Vera, a quien no le gustaba que se hiciera llamar Nacho con Queso.

“Él me dijo que le parecía muy feo mi nombre y si quería ser un artista internacional debería tener un nombre que todos pudieran pronunciar”, explica el joven.

Al principio no le gustó, pero una tragedia lo hizo cambiar de opinión. “No le hice caso. Un día estando en mi casa me avisan que mi amigo murió ahogado en Playas. En shock bajé a preparar canguil y vi un saborizante que decía Nacho Cheddar”.

Fue ahí que decidió tomar el nombre con el que se lo identifica, como un homenaje a su pana, e hizo el cambio en todas sus redes sociales.