Años atrás, quienes aspiraban a convertirse en Miss Ecuador recorrían la nación en la llamada Ruta de la Belleza y esa era una de las ilusiones de algunas de las aspirantes, ya que podían conocer nuevas culturas y compartir con sus compatriotas de todos los rincones de la patria.

Así lo cuenta a EXTRA María Luisa Corrales, de 20 años, candidata y representante de Quito, pues esa fue su principal motivación para ingresar al certamen.

Pero tras la pandemia del COVID-19, Corrales se dio cuenta de que hay cosas más fundamentales. “Aprendimos que una reina debe ser solidaria y siento que esa es la cualidad más importante ahora”, confiesa.

La emergencia sanitaria también modificó el proceso del certamen, pues se dio en su gran mayoría con clases a través del computador.

Sesiones telemáticas

Por ejemplo, las aspirantes actuales, cada viernes debían conectarse por Zoom para recibir asesoramiento de expertos en diferentes ramas y dependiendo de la actividad, se sometían a una prueba, más para repasar y saber en qué debían reforzar sus conocimientos, recuerda Milena Gusmán, representante de Ibarra.

“Fue difícil el hecho de que todo haya sido virtual porque nos tocó buscar la manera de transmitir nuestro carisma en la pantalla”, dice la joven.

Para Gusmán, el no haber compartido con la gente en las diferentes ciudades no le permitió empaparse de todas las tradiciones que existen en el país. Y aunque separadas por una pantalla, cree fue “maravilloso” el poder compartir con las otras chicas porque todas viven la misma ilusión y pudieron cumplir su sueño.

Cuando por fin pudo compartir con sus compañeras de manera presencial fue extraño someterse a las pruebas de COVID-19. A cada lugar al que asistían les tomaban la temperatura y estaban pendientes de ello que no exista ningún problema.

Mascarillas y maquillaje

Una de las cosas más complejas para María Luisa, y siente que para todas las demás, fue el mantener el maquillaje perfecto por el uso de la mascarilla.

Cuando comenzaron las actividades presenciales obligatoriamente tenían que utilizarla y este instrumento solía quitar el cosmético, por lo que debían retocarse bastante, menciona.

Si antes la sonrisa era una de las características esenciales de las candidatas en esta edición, dicho gesto era cubierto por el cubrebocas y tuvieron que aprender a expresarse con los ojos. “La organización nos enseñó a expresarnos con ellos y es parte de la nueva normalidad”, acota Corrales.

El auto

La nueva soberana será acreedora a un vehículo tipo sedán y con motor 1.6. Carolina Ñacato, comunicadora de la firma, menciona que este es el undécimo año que apoyan al certamen. Las muchachas pudieron conocer el carro en uno de los concesionarios en Guayaquil. Según ella, es importante que la Miss tenga un auto para movilizarse a las actividades que tiene y que no solo sea seguro, sino divertido, por lo que le agregaron diferentes dispositivos como uno de música ‘touch’ para que la soberana escuche sus canciones preferidas en sus trayectos. 

DATO

El evento se desarrollará en el hotel Wyndham Sail Plaza, en Manta, y será transmitido hoy, en vivo, a las 19:00 por Gamavisión, bajo la conducción de Carlos Luis Andrade y Claudia Schiess, Miss Ecuador 2011.