Desde que empezó la transmisión de la cuarta temporada de MasterChef (noviembre 2022), Jamil Faour protagonizó los momentos más polémicos y divertidos del programa, convirtiéndose en más de una ocasión en tendencia en Twitter. Incluso, recientemente, se rumoraba que estaba saliendo con la actriz Mare Cevallos.

Pese a que se los veía siempre juntos y hasta compartían en redes sociales fotos besándose, ellos no confirmaban si ya mantenían una relación amorosa; fue hace apenas unos días que dieron ese paso.

“Así es, somos novios. Hasta ahora todo va bien, ya llevábamos un tiempo saliendo y seguimos conociéndonos”, declara Faour para EXTRA.

EL PROGRAMA

Aunque Jamil vio el programa antes de ir a participar, dice que eso no bastó para estar preparado, pues se chocó con la realidad.

“No sabía a lo que iba. Había visto MasterChef de Estados Unidos, España, vi una parte de Ecuador. Sabía un poco del programa, pero la parte de la convivencia no esperaba que fuera así”. Sin embargo, asegura que fue una gran experiencia y agrega: “Me encantó la competencia y lo que más extraño es la adrenalina. Fui a cocinar, a divertirme. Fueron mis vacaciones gastronómicas. No me arrepiento en lo absoluto”.

LA GASTRONOMÍA

Su pasión por la cocina empezó desde muy pequeño. Explica que sus padres los “obligaban”, a él y su hermana a pasar los fines de semana en la cocina ayudando o limpiando, y con el paso del tiempo terminaron aprendiendo.

Por eso, desde muy joven, le encantaba preparar postres, lo que lo llevó a tener problemas con su peso.

“Era obeso. Solo cuando empecé a hacer atletismo pude bajar de peso. Luego me metí al mundo de la sal, le corté al azúcar. Cambié mi estilo de vida y me sentía mejor”, dice.

Aunque es conocido por los platillos que preparaba en la competencia, Jamil se dedica a algo completamente distinto: el marketing. Cuenta que aunque la comida es su pasión, no se ve siendo cocinero para siempre. Él se define más como un empresario.

“Yo no he estudiado para la labor de ser cocinero, no me he entrenado para eso y tampoco creo tener la aptitud para hacerlo. Me gusta ser la parte creativa, administrativa, de negocios (...) Siento que a Guayaquil le falta muchísimo en el tema de gastronomía. Me gustaría poder aportar un granito de arena en educar a las personas, en tratar de tener un poco lo que tiene, por ejemplo, Quito. Me gustaría ser esa persona que eleve la gastronomía en esta ciudad”, concluye.