Lo suyo es la música romántica. En sus 40 años de trayectoria artística, Edhisson se ha caracterizado por cantarle al amor, pero esta vez le hace a las canciones de despecho, tristes y melancólicas.

La oportunidad se dio gracias al cantante rockolero Segundo Rosero, quien lo animó y, a la vez, lo recomendó a la disquera colombiana con la que él está trabajando.  Aquí la entrevista:

¿Cómo se concretó esta incursión al género popular?

Sandra Milena Forero, gerenta de Discos Lags de Cali, Colombia, me contactó el año pasado porque había visto un vídeo mío en Youtube y, además, porque Segundo Rosero le había hablado de mí.

Es un cambio musical muy drástico...

El fuerte de la música popular son las letras de despecho, de traición, de enojo y mis letras no son así. Por eso, propuse que me permitan mantener mi línea romántica, pero en ese tipo de música y me lo aceptaron.

¿Se acostumbrará a hacer letras con mensajes pesimistas?

Los mensajes negativos te llevan a cosas negativas. Ese tipo de mensaje no quiero dar, no estoy en contra de quien lo hace, por eso busco mantener lo romántico en este género.

¿Con qué temas empieza?

Lo primero que hice fue mi balada Recuerdos, convertida al género popular. Me gusta porque no perdió su esencia. La segunda es No sé por qué te fuiste, que habla de un amor ingrato que se marchó.

¿Qué viene después?

A finales de febrero me voy a Colombia para hacer los vídeos de los dos temas y empezar la promoción.

¿Y si a sus fans románticos no les gusta este cambio?

En mis redes sociales tengo subidas las canciones y los comentarios son positivos. Rechazo no ha habido. También las he dejado en dos emisoras radiales y están sonando. Y eso que no soy de pagar coimas para sonar.

¿El tema No sé por qué te fuiste tiene que ver con alguna vivencia personal?

No, para nada. Y no es que quiera lanzarme flores, pero a mí nunca me ha dejado nadie.

La canción Un amor así, ¿qué significa para usted?

Es mi tema emblemático porque fue el que me abrió las puertas a nivel de Ecuador en 1988, además que tiene mucho que ver con mi vida.

¿Cómo es eso?

Era educador y renuncié para dedicarme a la música. Fue con Un amor así que arrancó todo.

¿Por qué con tantos éxitos musicales no logró trascender fuera del país?

No hice nada para lograrlo. No quise. En 1981 me tocó abrir un concierto de Leonardo Favio y me robé al público. El manager de Favio me propuso que sea el telonero en una gira de seis meses que él tenía por Latinoamérica, y le dije que no.

¿Por qué?

Ya tenía mi primer hijo y Chelita (Aldaz) ya estaba esperando a mi segundo hijo. No quise separarme de ellos. Hubo otra ocasión en que Rafa Galindo, de La Tremenda de Venezuela, me propuso ir a grabar dos álbumes a Caracas y me daba un departamento para mí y mi familia. Le terminé diciendo que no.

¿Se arrepiente de haber perdido esas oportunidades?

No. Si todo lo que me ofrecían no se daba por cualquier situación, ¿qué hacía con mi familia en un país que no conocía? Nunca olvidaré lo que Rafa Galindo me dijo cuando le respondí que no: ‘Tú tienes talento, pero si te quedas aquí, (Ecuador) dedícate a otra cosa’.

Con su talento, ‘la rompía’ fuera del país...

Dios ha sido muy grande conmigo. He estado con mi familia, he seguido haciendo música y he logrado el cariño de mi gente.

¿Qué considera que le falta todavía?

Desde hace años tengo la idea de hacer pasillos. En Lima me presentaron a Eva Ayllón y desde entonces quiero hacer un disco binacional, con pasillos y valses.