Solo le pedía a Dios que le diera fuerzas para asimilar la partida de su hijo, el presentador de farándula Miguel Cedeño... Dora Carreño recibía el pésame de familiares y amigos, ayer. Algunos se ‘quebraban’ con tan solo abrazarla, pero ella repetía en voz alta: “No voy a llorar. Debo ser fuerte”.

Desde finales del año pasado, cuando Miguel fue diagnosticado con cáncer linfático (linfoma de Hodgkin), la señora no derramó lágrimas frente a él. Tenía que ser dura para que su hijo enfrentara al “maldito cáncer”. Esa fortaleza sirvió para que Dorita (como le decía Cedeño) fuera la encargada de brindarle consuelo a todos.

Sin embargo, la lucha del también reportero terminó. Falleció a las 24:28. Él ingresó a UCI (Unidad de cuidados intensivos) en Solca el pasado lunes, tras presentar complicaciones en varios de sus órganos, producto de la enfermedad y una infección que le fue detectada.

Su cuerpo será velado hasta las 11:00 de hoy. A las 12:00 se tiene previsto su sepelio en el Cementerio Patrimonial de la Junta de Beneficencia de Guayaquil (centro de la ciudad).

Varios talentos de la farándula nacional llegaron, entre lágrimas, para darle el último adiós: Jasú Montero, Michela Pincay, Carolina Jaume, Pancho Molestina, Tahíz Panús, Mónica Buchelli, Andrea Aguilera, Ronald Farina, Úrsula Strenge, Mariela Viteri, Alejandra ‘la Suka’ Sánchez.

LOS DESEOS INCONCLUSOS

Siempre le gustó verse muy fashion, por eso su familia optó por colocarle un terno rojo (uno de sus favoritos), una corbata de moño negra y una camisa blanca. Su rostro lucía con una sonrisa. Según su amigo Edisson Guerrero, ese era uno de sus deseos, pues siempre le gustó verse impecable y regio.

Pero había algo más que quedó pendiente para Miguel. Le pidió a su amigo Mauricio ‘el Cuy’ Altamirano que le trajera de Estados Unidos la Barbie con la que rinden homenaje a Laverne Cox, transexual que se identifica como mujer y que, además de la actuación, es activista del colectivo LGBTI (lesbianas, gays, bisexuales, transexuales e intersexuales).

“Se la encargué, pero me llegaba a Miami en julio, porque iba a regresar a Ecuador en agosto, pero ahora debo buscarla. Tomé un vuelo para despedirme de mi amigo”, dice Mauricio.

SUS ÚLTIMAS HORAS

Cerca de las 21:00 del lunes, sus compañeros y amigos del programa ‘De boca en boca’ recibieron la llamada de parte de la hermana de Miguel, María Belén. Ellos lo acompañaron en su último momento de vida.

Silvana ‘la Veneno’ Torres, Lissette Cedeño, Cynthia Naveda, Emilio Pinargote y el productor Marlon Acosta estuvieron con la Cerecita del pastel. Marlon narra que el pasado 6 de junio su amigo se sintió mal y por esa razón fue internado, mientras se le realizaban varios estudios médicos.

“Se procedió con sus quimioterapias y, al parecer, todo iba mejorando, pero cuando terminó el sexto ciclo se dieron cuenta de que no había dado resultado, por eso debía someterse a radiación, pero tenía las defensas bajas. Lo restablecieron, se sometió al proceso, pero el cáncer fue muy agresivo”, menciona Acosta.

Entre lágrimas recuerda que ayer se tomó la decisión de ingresarlo por emergencia porque sus pulmones estaban llenos de líquido y sus riñones no reaccionaban de la forma adecuada.

“Estuve en la clínica en el momento que murió (...) Casi no tenía visitas por el riesgo y cuidados. También era vanidoso y no quería que lo vieran cuando estaba internado. Cuando me dijeron que estaba en UCI supe que las cosas no eran buenas, luego en la noche me informaron que le quedaban pocas horas de vida. Estuvimos hasta que murió”.

Para él no habrá una amistad más incondicional que la que le brindó la Cerecita. Resalta la forma con la que trabajaba, pues no había impedimento para que él fuera a realizar un reportaje, incluso se lo veía muy apasionado por lo que hacía. No había feriados o excusas para Miguel.

SU ÚLTIMO PROGRAMA

Fue el 3 de junio cuando Cedeño regresó a TC luego de 7 meses de haberse alejado para recibir el tratamiento contra el cáncer. Él tenía un nuevo segmento, ‘Guerreros de vida’, en el que narraba casos de pacientes que padecían la enfermedad.

“Queríamos que se fuera reintegrando de a poco. Ya hasta quería hacer notas para presentar en el programa, pero no lo dejaban aún, hasta que esté bien (...). Creo que si algo le faltó fue cumplir el sueño de hacer un programa con su hermana. Lo habíamos pensado, pero no se concretó”, explica apenado.

Marlon confiesa que ese día el presentador había amanecido algo recaído, pero sus ganas por salir nuevamente en la TV lo hicieron sacar fuerzas y se paró frente a la cámara sonriendo como siempre lo hacía.

UN DIVO

Para Silvana, lo ocurrido es muy difícil. No quería ver partir a su amigo. Explica que es un sentimiento que no asimila.

Ella jamás va a olvidar esa hora, 24:28, en la que estaba pidiendo por el alma de su amigo. ‘Quebrada’ y con lágrimas quería que su confidente y compañero se quedara más tiempo con ellos, pero no era posible.

“Era tan bueno, amistoso, único. No dejo de ver sus videos. No era envidioso, siempre te impulsaba a ser mejor. Llegaba a las 06:00 para molestarme. Siempre me decía: ‘Me encanta verte brillar’. Quiero que lo recuerden por su sonrisa, su alegría, su bondad, por lo divo que era, porque le encantaba que le diga que era divo y regio. El joven que utilizaba sus batonas rosas y brillantes, el que mejor maquillaje se ponía y el de los brillos y diseños únicos”, finaliza.