La realidad del fútbol de la provincia de Guayas, que será superado por Pichincha en títulos ganados en la primera división del campeonato ecuatoriano, preocupa a exdirigentes y exjugadores que han estado involucrados en el balompié local, porque consideran que “está en crisis” y la situación podría empeorar al no haber proyectos integrales para los juveniles.

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Mario Canessa Oneto, periodista en Guayaquil que fue presidente de River Plate Ecuador (2015), destacó que “es evidente la crisis” y eso se refleja en las finales del torneo, la poca participación de jugadores de la provincia en las selecciones formativas y absoluta de Ecuador y los escasos estrenos de juveniles en los principales equipos: Barcelona y Emelec.

“El fútbol de Guayas está en crisis. Los clubes quiteños han demostrado que se han organizado internamente, preocupándose por sus formativas, pero eso Guayas lo perdió hace mucho tiempo y ahora está pagando las consecuencias. Y por esta razón, los chicos de pueblos cercanos, que antes buscaban venir a Guayaquil, ahora prefieren los proyectos de los clubes de Quito”, explicó Canessa.

Juan Triviño, quien fue defensa de Emelec y actualmente trabaja en la formación de juveniles en el cantón Colimes, manifestó que el fútbol guayasense decayó porque el Ídolo y el Bombillo dejaron de preocuparse en darles la facilidad a los juveniles para que puedan formarse. Y, por aquella razón, muchos pelados de Colimes prefieren ir a la capital.

“Ya no hay ese valor agregado para los chicos que no son de Guayaquil, no les dan toda la formación posible. Antes los ayudaban para que se puedan trasladar, con estudios y ayuda económica para la familia, pero eso se ha perdido. Incluso en la formación están fallando, porque llegan con vacíos al primer equipo, sin saber parar una pelota o perfilarse”, acotó Triviño.

Julio César Rosero, entrenador en Guayaquil que también estuvo en las divisiones formativas de Barcelona, manifestó que los dirigentes de los clubes guayacos no han tenido la capacidad para desarrollar un proyecto deportivo con objetivos claros que ayude a mantener la hegemonía en el balompié ecuatoriano.

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“No hay suficientes lugares en los que puedan entrenar los chicos. Antes Barcelona y Emelec tenían sucursales, pero ahora los chicos tienen que ir al parque Samanes (norte de la ciudad), si quieren entrenar con los amarillos, o al complejo Rocafuerte en la vía a la costa, si quieren entrenar con los azules. Para un chico del Guasmo (sur) es difícil trasladarse”, dijo Rosero.

Y acotó: “Deberían hacer convenios como lo hacía El Nacional con los cuarteles militares para que puedan entrenar los chicos, focalizaban una zona y les daban las oportunidades a los niños para asistir. Acá en Guayaquil hay muchos lugares que se pudieran aprovechar, pero no se hace nada por darles facilidad a los juveniles”.

Alfonso Harb, expresidente de Barcelona entre 2010 y 2011, manifestó que no considera que el fútbol de Guayas se haya estancado, porque desde la temporada 2010 hasta la actual solo en la final del torneo ecuatoriano 2019 no estuvo un equipo de Guayaquil, ya que ese año la disputaron Delfín y Liga de Quito.

“Esto es un tema de racha y los equipos de Quito están en buen momento. Igualmente, los directivos de Barcelona y Emelec se deben preocupar en mejorar sus equipos para recuperar espacio en el campo internacional, si se enfocan en mejorar en este ámbito les irá mejor en el torneo ecuatoriano”, finalizó Harb.

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