Mushuc Runa se ha convertido en la sorpresa de la LigaPro. Con un trabajo silencioso se encuentra en el tercer lugar, con opciones de pelear por ganar la etapa, tiene al goleador y la segunda mejor defensa del torneo.

Geovanny Cumbicus es el ‘jefe’ del Ponchito, al que dirige por segunda ocasión. Conoce muy bien la filosofía del conjunto de Echaleche y las exigencias de Alfonso Chango, presidente vitalicio del club.

“Tenemos mucha felicidad por el momento que vivimos, por encontrar una identidad de juego. Pero estamos con los pies en la tierra, el estar pelando por la etapa nos ilusiona y motiva”, analizó el técnico nacional en diálogo con EXTRA.

Recalcó que estos buenos resultados son fruto del proceso que inició apenas fue nombrado como técnico del Mushuc Runa, en diciembre del 2020, cuando empezó a definir a la plantilla.

“Iniciamos con un estudio previo de los perfiles de los jugadores. Revisamos muchas carpetas, recopilamos información. Fueron muchos días de analizar partidos completos, poner en la balanza cualidades físicas, técnicas y tácticas para elegir a los adecuados para nuestra idea de juego”, contó Cumbicus.

Confesó que les costaron los primeros juegos, ya que varios refuerzos se incorporaron en la parte final de la pretemporada y que el nivel fue creciendo “cuando todo el grupo se acopló. Además, hay un gran compromiso de parte de los jugadores que están convencidos de conseguir cosas importantes”.

CON BUEN OJO

Una de las claves del Ponchito también está en la buena elección de los extranjeros que se evidencia en que el delantero argentino Jonathan Bauman es el goleador de la LigaPro y el central haitiano Ricardo Adé es una muralla.

“Buscamos minimizar el margen de error en los extranjeros. Es un esfuerzo del club y ellos deben marcar la diferencia”, señaló Cumbicus.

Tiene claro que la exigencia cada vez será mayor, por lo que trabaja en los aspectos futbolísticos y mentales para “sostener una regularidad que nos permita seguir siendo protagonistas y clasificar a un torneo internacional”.