Exclusivo
Deportes
Mejía, el Patrón del contragolpe
Mejía se impuso 2-1 al Vicente Rocafuerte en el clásico nacional y clasificó a la final de la Superliga Estudiantil. Carlos Salazar fue la figura de los capitalinos.
Las dos instituciones con más historia de Quito y Guayaquil se enfrentaron por primera vez en un torneo colegial. Mejía (125 años) y Vicente Rocafuerte (181) llegaron a las semifinales de la Superliga Estudiantil tras ser los mejores de las fases previas disputadas en sus ciudades.
Y ese buen nivel lo evidenciaron en el choque que protagonizaron el viernes 27 de enero en el estadio de la Federación de Ligas, en el norte de la capital.
A los guayaquileños no les afectó el fuerte sol y la altura (2.800 metros). Salieron con vocación ofensiva y a los dos minutos abrieron el marcador por intermedio de Elkin Muñoz, capitán y figura de los vicentinos.
Un golpe que hizo reaccionar a los locales que contaron con el respaldo de una bulliciosa barra. El extremo Carlos Salazar lideró la levantada del Patrón. En un rápido desborde fue derribado en el área por Jordan Lindao. El propio Salazar concretó el empate desde el punto penal al minuto 10.
UNA GRAN BATALLA
El juego subió en intensidad con mayor dominio del balón por parte de los visitantes, mientras que los capitalinos apelaban al contragolpe. Vicente Rocafuerte tuvo las oportunidades más claras de anotar, pero la falta de puntería o las intervenciones del golero Rubén Guerrero lo evitaron.
Cuando parecía que el clasificado a la final se decidía en los penales, una rápida en contra del Mejía provocó un tiro libre que logró ser conectado por Salazar para sellar el triunfo.
“El Mejía se caracteriza por su garra y lo demostramos en este clásico que se juega por primera vez. El amor por el colegio nos impulsa”, afirmó emocionado el goleador.
Por su parte, Agustín Aguirre, entrenador del Mejía, detalló que sus jugadores aplicaron muy bien la estrategia de defenderse y contragolpear. “Sabíamos que tenían buenos jugadores, nuestra idea era llegar a los penales donde los teníamos bien estudiados”, confesó el técnico que también es profesor de educación física del plantel.
Del lado del Rocafuerte, que llegó como el campeón defensor del torneo, se dieron reclamos hacia el árbitro al finalizar el encuentro.
En la gran final, a jugarse el domingo 29 de enero en el estadio Banco Guayaquil del Independiente del Valle, Mejía se medirá al 19 de Octubre de Yaguachi, que dejó en el camino al Americano de Quito, al imponerse 5-4 en la definición por penales.