Tiene 17 años, pero su habilidad con el balón la ha mostrado en tres equipos de la Superliga femenina. María José Coronel empezó en Barcelona en 2019; en 2020 se fue a Liga de Macas y en esta temporada cumplió su sueño de jugar en el equipo de sus amores: Emelec.

Majo siempre ha sido eléctrica, pero a los 15 años se puso la amarilla e hizo varios goles para las toreras, el más feliz fue su padre Adrián, quien es hincha del Ídolo. Ahora él no sabe si se vestirá de azul por su hija, quien manda en el medio campo del Foco femenino.

¿Cómo asumes la responsabilidad de jugar tu tercera Superliga de fútbol?

Es algo lindo, a uno le gusta esto, y llegar a la tercera Superliga es motivador. Un reto nuevo.

Empezaste ‘peladita’ en el fútbol profesional...

Fue una experiencia nueva, el hecho de jugar a corta edad es una motivación. Era muy menor, pero se dio para que juegue y haga goles.

¿Con qué experiencia te quedas?

Con todo, el equipo, las compañeras, la gente que nos iba a ver, es un club grande y era la primera vez que estaba. Fue una buena temporada.

De Barcelona te fuiste a jugar a Macas.

Fue distinto, pero como experiencia me ayudó a crecer. Aprendí muchas cosas y también cambié de puesto. En Barcelona actuaba más de cinco, en cambio en Macas lo hacía de 10.

¿Dónde te sientes mejor?

En todo el medio campo me siento bien, como 5 u 8, pero siendo 10 tienes más libertad y con mayor posibilidad de ir al ataque, pero con más responsabilidad.

El tema de los números que usas, ¿tienes uno en especial?

Me gustan el 5 y el 6, pero juego con el que me den. No hay problema, lo que deseo es actuar.

¿Cómo llegas a Emelec con un pasado en Barcelona?

Estaba en el equipo de Macas, pero al entrenador Andrés Encalada le salió un reto diferente. Las jugadoras salimos y me vine a probar a Emelec, además a la profesora (Gisella Moreira) le gustó mi juego y me dijo que me quede, estamos haciendo una buena pretemporada.

Jugar en Emelec debe ser un sueño para una hincha eléctrica

Sí, es algo que siempre soñé y ahora se dio, pero mi papá es barcelonista. Estoy en el equipo que me gusta.

Y cuando estabas en Barcelona, ¿cómo hacías con el corazón amarillo?

Había gente que me molestaba, porque sabía que era hincha de Emelec, pero en Barcelona lo hice todo de manera profesional y me fue bien. Creo que a mi papá le tocará ponerse la camiseta de Emelec.

¿Qué pasará cuando enfrentes a Barcelona?

Están mis amigas en el equipo, además la entrenadora me conoce de pequeña. Será un buen encuentro y volver a estar con quienes fueron mis compañeras será lindo.

¿Qué esperan las futbolistas ecuatorianas de este torneo?

Esperamos que nos den todo el apoyo para tratar de tener el mismo trato con el fútbol masculino, desde el tema de transmitir por TV hasta el de los sueldos.

Algunas chicas a tu edad están en otras cosas, pero tú te la pasas entrenando...

Es una vida diferente, vale el sacrificio de las cosas que se deja por estar entrenando. A veces la familia se va de paseo y uno no puede por tener que estar en lo que le gusta.

17 años, ¿qué esperas del fútbol femenino?

Apenas tengo tres años de manera profesional, quiero tener más experiencia, seguir jugando y volver a ser tomada en cuenta en la Tricolor.