Un ambiente de unidad y alegría se vive en Independiente del Valle de cara a las finales de la LigaPro. Eso se pudo evidenciar en el entrenamiento del martes 5 de diciembre, en el que los jugadores fueron apareciendo con el sonido de la canción infantil ‘En el bosque de la China’.

El arquero Moisés Ramírez, que se recuperó de una lesión ósea y será titular el domingo 10 de diciembre en el primer duelo ante Liga de Quito, en el estadio Banco Guayaquil, encabezó el desfile de los futbolistas.

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Lo hizo bailando y con una gran sonrisa que contagió a sus compañeros que se dirigían a los graderíos de la cancha principal del complejo de los negriazules, donde ya se encontraban algunos elementos de Independiente Juniors, que iban a servir de sparring en la práctica.

Uno a uno los jugadores rayados saludaron a los del equipo filial mientras la música pasaba de los ritmos infantiles al reguetón. El ritual de santiguarse antes de pisar el césped se dio en la mayoría de los futbolistas, que aprovecharon los primeros minutos para conversar en medio de risas.

Kendry Páez, la joya de los negriazules, fue el último en ingresar a la cancha y levantó el pulgar cuando desde los graderíos le saludaron.

Los arqueros, liderados por la Araña Ramírez, fueron los primeros en trabajar, mientras cerca de ellos regaban la cancha, lo que fue aprovechado por Lorenzo Faravelli para tratar de ‘refrescar’ a sus compañeros. En medio de los ejercicios, una de las mangueras se activó y bañó a los goleros.

Mientras tanto, el resto del plantel inició con las actividades con balón esperando al técnico Martín Anselmi. El estratega argentino llegó unos cinco minutos después con su pizarra para observar los trabajos recreativos y tomar el control del entrenamiento, en busca de pulir la estrategia con la que espera dar el primer paso hacia la segunda estrella de la LigaPro para los del Valle.

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