A la hora de defender a un equipo, Pedro Pablo Perlaza lo hace con todo. Y si es de referirse al arbitraje, no tiene ‘pelos en la lengua’. Lo hizo el año pasado y lo volvió a hacer este domingo.

En el 2019, cuando jugaba en Delfín, lloró de coraje en la final de la Copa Ecuador y dijo: “Liga de Quito nunca fue superior a nosotros. Nosotros pedimos que no nos ayuden, que nosotros tenemos fútbol, no necesitamos ayuda de ningún árbitro; pero siempre los árbitros meten la mano donde no tienen que meterla”.

Ahora que viste la camiseta del equipo al que criticó, se mandó una descarga que ‘da miedo’. Y en pleno feriado la gente más habla de esto que de lo que sucede en la LigaPro.

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En el 2019 se mandó sus ‘perlas’ en plena entrevista, pero en este 2020 fue diferente.

No se dio cuenta de que la cámara estaba sobre él, y olvidó que ahora con los micrófonos encendidos en la cancha todo se puede escuchar. Claro está, siempre y cuando no pongan en ‘mudo’ el audio.

Perlaza no hizo goles, no salió expulsado, no se sacó la camiseta, no besó la pelota y sí se colocó la mascarilla después del partido. Es decir, hizo todo correcto en las cuestiones que ahora se pueden sancionar.

Lo que pasó fue que a Pedro Pablo Perlaza, el buen defensa de Liga de Quito, le salió toda ‘la calle’ en media cancha.

NO VIO LA CÁMARA

Barcelona iba ganando 2-0, era el minuto 61 y los albos estaban ‘ofuscados’. Cuando la cámara se acercó a Perlaza, el jugador, mirando a un árbitro (pudo ser al asistente o al cuarto réferi), le mandó la siguiente descarga que ahora es tendencia en redes sociales: “Eres barcelonista”. Y luego vino lo más fuerte: “No tienes personalidad para pitar estos partidos, cagón”.

En el cotejo el árbitro central era René Marín, quien no se percató del incidente. No se sabe si lo puso en el informe.

¿Qué viene ahora? Se aproxima un show al que ya le tenemos el final: LigaPro pedirá a GolTV (que es la empresa que transmite los partidos del torneo), el video original. Luego tratará de poner una sanción a Perlaza, este pedirá disculpas y fin de todo el drama. Puede que haya sanciones o puede que no, pero de que el réferi quedó bien ‘adornado’ con los insultos, eso nadie se lo quita.