Exclusivo
Deportes

Jordan Sierra busca llegar a la liguilla final de la LigaMX con Juárez.ARCHIVO / EXTRA

Jordan Sierra: "Los partidos en México son como finales cada fin de semana"

El volante que milita en el Juárez de la Liga MX, es uno de los ecuatorianos más regulares. Ha estado en dos mundiales, uno de clubes y un sub-20. Aprendió a comer ají, pero extraña la sal prieta

Trata de tener perfil bajo, pero es imposible con su derroche de fútbol. El manabita Jordan Sierra Flores lleva seis años jugando en México. Su actual equipo es el Juárez, que está peleando un cupo en la liguilla final. El volante, quien jugó con la selección de Ecuador el Mundial sub-20 de Corea del Sur en 2017, hizo del fútbol azteca su casa.

Llegó cuando era un ‘pelado’ de 19 años, se ha adaptado tan bien que va por su quinto equipo. Se siente cómodo en la LigaMX, por eso le gustaría seguir de largo en ese país.

Jordan tiene la ilusión que su nombre vuelva a estar en las nóminas de la selección de mayores. Hace dos semanas se mandó un golazo (victoria 2-1 de Juárez contra Querétaro), que se hizo viral en el mundo. El mantense de 25 años habló con EXTRA sobre su trayectoria en México, que lo ponen en el top de los embajadores del fútbol tricolor en las canchas aztecas.

Seis años en México, ¿ya no quiere volver a Ecuador?

Este tiempo acá en México me ha hecho crecer mucho como jugador, pero más como persona. Estoy rodeado de mucha gente buena e inteligente, que cada vez me ayuda en mi vida para seguir creciendo, tanto en lo futbolístico como en la vida cotidiana. Han sido años de aprendizaje y lo sigo haciendo todos los días, pero cuando uno se da cuenta de todo el tiempo, ve que han sido muchos años y eso es bueno. Quiero que sigan más.

¿Cuál ha sido el secreto?

Creo que en realidad no hay secretos, solamente hay que ser profesional en todo, es decir, dentro y fuera de la cancha y entregarse al ciento por ciento en cada entrenamiento y partido, como si fuera el primer día de esta profesión, y eso ha sido la clave para poder seguir aquí; es un fútbol muy competitivo y cada día salen más jugadores.

Hasta un Mundial de clubes viviste.

Es algo lindo lo que pude vivir con Tigres (2021 jugó la final con Bayern), espero que algún momento pueda estar nuevamente en otro Mundial de clubes. Ha sido una de las experiencias más gratas que me ha dado Dios en esta carrera. Pasan los años y miras los recuerdos y dices: ‘Esto me pasó a mí’.

Dejar Manta por México, ¿qué fue lo más complicado?

Lo más complicado fue dejar a mi familia, que siempre estuvo cerca de lo que hacía. Antes de venir solo había jugado en equipos de Manta, pero gracias a Dios siempre han sido un apoyo incondicional en cada momento y eso les agradezco siempre.

Siempre perfil bajo.

Sí, me gusta siempre andar en perfil bajo, es mi forma de ser, no es que sea creído, es lo que me ha dado y ayudado para poder crecer cada día.

Su golazo ante Querétaro dio la vuelta al mundo.

Fue un bonito gol, que hasta yo me sorprendí, ver las repeticiones por todos los lados y no lo podía creer; espero seguir marcando de esa forma, me gustó mucho, creo que es la anotación más famosa que he hecho.

¿En qué ha cambiado en estos años?

Creo que más que haber cambiado por estar acá, la vida misma me ha hecho cambiar y madurar en muchas cosas, y eso agradezco a la vida, porque me hace crecer siempre. Sin olvidar que todos los días uno aprende algo.

¿Qué lo hizo madurar como jugador?

Los partidos que son como finales todas las semanas, debido a la forma de jugar el torneo que es muy corto, a mis compañeros, a los clubes que me dieron la oportunidad de jugar y todo lo importante que jugamos siempre, eso me ha hecho madurar mucho. El pasar de las temporadas deja una experiencia única, algo que al final sirve para el día a día.

Juárez está peleando la clasificación.

Sí, es un club que está creciendo y tenemos como responsabilidad poder estar en una liguilla con los grandes jugadores que tenemos.

¿No pierde las esperanzas de volver a la selección nacional?

Siempre trabajo para estar allí, y solo espero algún momento poder estar nuevamente, uno que vivió la experiencia de un Mundial sub-20, tiene más ilusiones de poder ser llamado. Pero eso se dará cuando Dios lo diga, por ahora hay que seguir entrenando sin desmayar.

¿Es un sueño?

Sí, el sueño siempre está allí, pero eso es un trabajo a diario en cada entrenamiento, para que ese sueño se haga realidad. Mi paso por la selección sub-20 fue un sueño que llegó.

De sal prieta a ají mexicano.

Antes de venir a México no comía nada de ají, pero ahora no puedo comer sin ají, y cuando como sin ají, siento que no me sabe bien la comida. No pensé que me iba a enseñar y que me iba a gustar tanto, pero una sal prieta manabita es un nivel superior.

De las comidas mexicanas, ¿con cuál se lleva mejor?

Hay mucha comida mexicana que me gusta, es muy difícil elegir una. Pero como la manabita no hay comparación, la nuestra es espectacular y la extraño mucho. Claro que cuando voy me desquito.

Y de la música, ¿cuál se te ha pegado más?

Me gustan mucho todos los géneros, pero la verdad, estando aquí, la música de banda y los corridos los he comenzado a escuchar mucho, están buenos y son muy pegajosos, pero no puedo decir que los sé bailar bien.

Le falta la jugada del matrimonio...

(Risas) No estoy casado, esperemos que pronto se dé esa oportunidad.