A la par que se oficializó que Gustavo Alfaro no renovaría su vínculo con la Tricolor, se confirmó que hay valores pendientes de pago con el exseleccionador. Estos rubros corresponderían al sueldo de noviembre del cuerpo técnico y a los premios por la clasificación a la Copa del Mundo de Catar.

El salario inicial de Alfaro y sus colaboradores fue de $ 1,7 millones anuales, el mismo que tenía que incrementarse para 2022. Esta cifra se la conocería el martes 31 de enero, cuando la Ecuafútbol presente el informe económico de la pasada temporada.

Mientras tanto, los directivos siguen en la búsqueda del nuevo seleccionador, que se acople a su economía. Una fuente de la FEF, que pidió reserva, comentó que se podría destinar entre $ 2,5 y $ 3 millones al año para el sucesor del argentino Alfaro.

Al consultarle sobre si las deudas con el anterior entrenador podrían ser un factor que complique las negociaciones con los candidatos al banquillo, dijo que “no creo que esto afecte”.

Francisco Egas, presidente de la Ecuafútbol, indicó que espera que el proceso de elección del seleccionador no sea muy largo y que tienen varias carpetas sobre la mesa. Personalmente está llevando las negociaciones. Esto se refleja en que el directorio de la FEF no se ha reunido para tratar este tema.

A ROMPER EL CHANCHITO

Entre los nombres que han aparecido con más opción figuran el del argentino Ricardo Gareca y del uruguayo Guillermo Almada.

El primero, que dirigió a Perú en las dos últimas eliminatorias, tenía un sueldo de $ 3,7 millones anuales, mientras que Almada tiene unos ingresos de $ 2,2 millones por año en el Pachuca mexicano.

Otro candidato sería el argentino Sebastián Beccacece, quien fue asistente técnico de Jorge Sampaoli en Emelec y la selección chilena. Tras esto se estrenó como timonel en U de Chile, Independiente, Racing y Defensa y Justicia.

En el programa Debate Fútbol, de Directv Sports, mencionaron que ya se dieron los primeros diálogos con el estratega albiceleste.