Guillermo Almada, entrenador del Pachuca, fue quien cuando estaba en Barcelona pidió a Félix Torres, luego se lo llevó a Santos Laguna y lo potenció. El DT uruguayo habló de lo que se hizo con el zaguero nacional: “Desde que lo vimos nos dimos cuenta de sus grandes condiciones. Lo llevamos a Barcelona cuando tenía 18 años, vimos un gran potencial en él. Comenzamos a trabajar en técnicas de marca, con balón, en el juego aéreo y el colectivo”.

El DT reveló lo que pasó cuando al jugador se le pedía más trabajo: “Intensificamos sus trabajos. Recuerdo que a veces se molestaba porque lo dejábamos después del entrenamiento con más trabajo, o lo hacíamos hacer llegar antes, pero creíamos que necesitaba eso. Sabíamos que tenía grandes virtudes, hizo mucho sacrificio para mejorar y ser un jugador completo”.

Almada no tiene dudas de que Félix es el mejor zaguero de México, “pero aún no llega al techo que puede dar. Félix puede jugar en cualquier equipo del mundo, seguro que dará mucho. Nos alegra que le vaya bien, tiene una gran familia, es un buen chico”, dijo un alegre Almada, ahora que el mundo habla de aquel ‘pelado’ que él llevó a Barcelona en el 2017 cuando tenía 18 años.

SUEÑO DE TORRES

A sus 25 años, ya tiene una historia que contar. Es Félix Torres, quien en el futuro les puede decir a sus hijos y nietos que llegó de Portoviejo al Barcelona con 18 años, luego se fue a México y ahora dicen los entendidos que es el mejor zaguero central de la LigaMx.

A a eso le suman que lleva dos goles en las eliminatorias, que ha jugado 10 partidos y que es el defensa con mayor rendimiento de Sudamérica.

Torres, quien es de poco hablar, le hizo el gol a Brasil y luego dio el pase para la anotación ante Perú. De ensueño, considerando que es defensa. Y si eso parece poco, Torres es el líder en rechaces en México, con 43, y el tercer jugador con mayor cantidad de balones recuperados: lleva 21.

SU MOMENTO

“Me siento muy bien, muy feliz de haber ido y apoyado a mis compañeros, de dar el máximo en cada encuentro que me toca estar y vivir esa linda experiencia de reunirme con mis compañeros de Ecuador”, manifestó Torres en tierras mexicanas.

Para un defensa, irse al ataque es como tocar el cielo. “Es lo que se viene buscando siempre, dar el máximo, aportar desde cualquier posición en la que estés. En mi caso soy un defensa, y haber contribuido con un gol y una asistencia es algo muy valioso para mí. Mis compañeros me brindan esa confianza para así yo sacar mi potencial y aportar con mi granito de arena”.