Algunos jugadores de Mushuc Runa, Aucas, Liga de Quito e Independiente del Valle llegaron con unas libritas de más a la minipretemporada (10 de junio), aunque esos ‘rollitos’ los pueden quemar en una sola sesión de entrenamiento, según los preparadores físicos de los equipos mencionados.

Esto después de que estuvieron entrenando durante 87 días en sus ‘caletas’, ya que el pasado 15 de marzo se declaró la cuarentena en Ecuador por la pandemia de coronavirus. La LigaPro se paralizó cuando se disputaba la quinta fecha.

En el Papá se analiza el peso

Tras la primera semana de entrenamientos, los de Aucas se sometieron a un control antropométrico (estudia las medidas del cuerpo humano) y de pliegues (valoración de la composición corporal), para que el cuerpo médico analice su estado en cuanto al peso y masa muscular.

A decir del doctor del club, Daniel Rosales, no hubo mayor novedad, pero varios futbolistas subieron de peso. “Vimos unos gramos adicionales, pero nada del otro mundo. Gracias a que mantuvimos las rutinas por Internet no hubo mayores cambios en cuanto al aumento de peso de los chicos”.

El galeno indicó que el trabajo se destinará con el fin de que los jugadores recuperen la fuerza muscular. “Mantuvimos controles de nutrición y rutinas verificadas todos los días. Todos respetaron las disposiciones”.

Dos libras más en Albos

El médico de Liga de Quito, Juan Barriga, admitió que hay jugadores hasta con unas dos libras de más, pero que no significa algún problema. “Un futbolista puede perder hasta dos libras en una sola práctica”.

Según el doctor, los jugadores tomaron la paralización con mucha seriedad. “Ya no es como antes, que venían del descanso de final de temporada con varias libras extra. Los pequeños cambios en el peso pueden tener otras razones como la ansiedad del encierro. También pueden perder libras por ese mismo estrés”, explicó.

No todos cumplieron

En Independiente del Valle hay un cuadro similar. La jefa del departamento médico, Wendy Montiel, contó que durante la cuarentena se adelantaron a las posibles consecuencias sobre la pérdida de masa muscular y recomendaron suplementos alimenticios.

“Luego de realizar los chequeos la mayoría está en el porcentaje correcto de masa muscular y grasa”, dijo Montiel, aunque reconoció que tres jugadores no cumplieron con los parámetros. “Es algo que se puede ir manejando hasta corregir”, explicó.

Profesionalismo en el poncho

Fabián Venegas, preparador físico de Mushuc Runa, aseguró que están haciendo un perfil personalizado de cómo llegan físicamente para ver cuáles son las necesidades individuales que tiene cada uno. Encontraron dos jugadores un tanto gorditos.

“Hay un par de casos, pero no son extremos. Hablamos de jugadores con dos kilos, cosa que es mejorable en muy poco tiempo. Distinto es cuando un jugador llega con cinco kilos, eso ya es una cuestión preocupante. Por eso recalco el profesionalismo de los jugadores porque le dieron seriedad al trabajo”, manifestó Venegas.

Harto abdomen en el city

El preparador físico de Guayaquil City, Leandro López, aseguró que los ‘ciudadanos’ llegaron mejor físicamente de lo que estaban antes de la cuarentena, debido a que los jugadores realizaron constantemente trabajos de fuerza.

“Se hizo mucho trabajo con la parte media (abdomen), que creo que esa era la zona más importante para trabajar en el sentido de que el mismo sedentarismo te lleva a que aparezcan los ‘rollitos’, entonces se le dio mucha importancia a eso”, mencionó López.