Nadie sabe por dónde ingresó al estadio, si tenía dueño o su nombre; lo cierto es que el gato negro que irrumpió el domingo 1 de septiembre en el partido entre Emelec y Orense se volvió viral y hasta dicen que "ayudó a ganar (2-1)" al equipo eléctrico que no conseguía una victoria hace cuatro partidos ya en su casa del Capwell.

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Coincidencia o no, todo sucedió entre el minuto 74 y 75 del partido. Emelec perdía 0-1 y la desesperación de la hinchada en las gradas era evidente. Los aficionados se rascaban la cabeza, se llevaban las manos a la cara y otros rezaban, cuando desde el lado de la tribuna San Martín ingresó el felino. Cristhian Gavilánez, hincha del equipo, quien ese día acudió al Capwell con su hija, Lia, relata para EXTRA el momento.

"Yo acudí a la localidad de tribuna General Gómez. Recuerdo que el gato entró justo en un ataque del orense. Obviamente el animalito ingresa porque estaba asustado. Se metió a la cancha del lado de la San Martín, lugar donde jugaba en ese momento Emelec; desde ahí se fue en precipitada carrera hasta el lado de Orense, donde el asistente técnico del estratega Santiago Escobar lo estuvo llamando para retirarlo de la cancha, pero el gato no le hizo caso", dijo.

Y agregó: "Fue entonces que se cruzó desde la San Martín, pasó por el arco rival de Rolando Silva y llegó a la General Gómez, donde el jugador de Emelec Alexander González lo quiso coger, pero el gatito alcanzó a meterse entre las vallas de publicidad que estaban en ese sector. No se lo volvió a ver más", precisa Gavilánez.

Para el hincha, al igual que muchos otros aficionados que este martes 2 de septiembre llenaron de comentarios las publicaciones donde salía el felino, fue el gato el de la suerte.

"Muy al contrario de lo que se suele pensar de un gato negro, creemos que nos dio suerte, porque el arquero Silva recibió los dos goles que definieron el partido en los 2 o 3 últimos minutos. El estadio se quería venir abajo gracias al Michi Bombi (por Bombillo), así lo bautizó mi hija", acotó Gavilánez entre risas.

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