La novela Jordi Cruyff no termina. Desde el exterior llega información de una posible renuncia del seleccionador de la Tri, pero en la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) no se han tomado resoluciones, cerca de una semana después del anuncio del entrenador de no regresar al país.

El directorio no se ha reunido para analizar este tema y no tiene una fecha definida para hacerlo, pese a estar con el inicio de las eliminatorias a la vuelta de la esquina.

Las disputas internas entre los dirigentes agravan esta situación y Ecuador es la única selección que sigue sin tener claro quien estará en su banquillo cuando inicie el camino a Catar 2022, en octubre, y el combinado nacional enfrente a Argentina, en Buenos Aires.

Francisco Egas, presidente de la Ecuafútbol, tras conocer las “dudas” de Cruyff, afirmó que buscarán “poder reaccionar y recomponer la situación lo más pronto posible”, pero esto no ha sucedido.

El dirigente envió a Jaime Estrada, vicepresidente del organismo y con quien mantiene una pugna por el mandato de la FEF, información sobre montos, acuerdos y presupuesto. También le indicó que a Cruyff se la ha pagado por 52 días de trabajo. El valor restante de los casi seis meses de relación con el estratega holandés, hasta su pedido de tiempo para analizar su futuro, queda como saldo a favor de la Ecuafútbol.

Carlos Galarza, vocal del directorio, indicó que no han recibido la convocatoria para una reunión del directorio y tampoco el contrato del seleccionador, que fue uno de sus pedidos.

Manifestó que aprovechó que el martes 21 de julio se realizó el Comité Ejecutivo, donde se analizó la reanudación del torneo de segunda categoría y la Superliga femenina, para nuevamente pedirle a Egas la cita para definir el futuro de Cruyff.

“Estamos esperando, si en estos días no hacen nada ellos tendremos que autoconvocarnos. Egas con el secretario (Gustavo Silikovich) tienen que hacer la convocatoria”.

Para Polo Carrera, exseleccionador nacional, es necesario recuperar la paz en la Ecuafútbol para tomar decisiones en conjunto.

“Primero deben poner la casa en orden. No creo que ningún técnico llegue a dirigir la selección mirando que el directorio de la Federación no se pone de acuerdo. Es muy difícil cuando la casa no está en orden”, comentó.

Agregó que “deben hacer las paces los dos bandos, recuperar la unión en el directorio, para después, de forma conjunta, definir sobre el entrenador de la selección”.