Septiembre de 1993, era mis primeros pasos como periodista deportivo de manera oficial en EXTRA. Paco López Valdez, mejor conocido como Paloval era mi editor deportivo. Era el comienzo de este sueño llamado periodismo.

Era un lunes que en la redacción me decía... "mañana habla con Carlos Luis Morales, preguntale..." fue la sentencia.

De Morales antes de entrar a EXTRA sabía que era la figura del equipo, el hombre del penal ante River Plate, el tipo que salía en las portadas y por quien las jovencitas de los años 80 y 90 decían que era el hombre de sus sueños.

Antes lo había visto de lejitos, pero ahora íbamos por la entrevistas.

Eran otros tiempos, los reporteros se mezclaban con los hinchas y avanzaban hasta el túnel del Monumental en Guayaquil. Todavía no había la burbuja que tiene ahora.

El entrenamiento había terminado, y con una grabadora del porte de un ladrillo buscaba a Morales.

De los periodistas que estaban eran de los que recuerdo a: Joffre Canchita Tomala, Gustavo Alvarez, José Vicente Ponce, Ufredo Borbor, Jaime Antonio Alvarado y más, todos ellos eran reporteros.

Morales ya había dado declaraciones, yo quería las mías, era una nota especial.

"Carlos Luis me regalas unos minutos, es para una entrevista", le dije. Morales me queda viendo, creo que lo de novato se notaba o mi cara no era conocida en ese sector de Guayaquil.

"No te puedo dar unos minutos, que sean los que se lleve la entrevista, no hay problema", decía Pestañita, mientras por un costado y haciendo bromas pasaba Raúl Noriega, la risa contagiosa de Byron Tenorio, José Gavica que era una de las estrellas, Rubén Insúa y su melena al viento, eran los últimos meses de Carlos Muñoz. Y la seriedad de Jimmy Montanero estaba en toda su plenitud.

La entrevista se dio, al final Morales dice si lo sacan a color sería espectacular y que pongan una bueno foto, especialmente en una que se lo vea volando.

Eran los tiempos de las cámaras de rollos, uno tenía que llegar al diario para recién ver como salían las fotos.

MUCHA FOTO

Antes que llegue Cristiano Ronaldo con el show de las cremas y los perfumes, ya en Ecuador, Carlos Luis era de los que comenzó a destacarse por la buena presentación. Se bañaba en perfume al salir del camerino, y la presencia era parte de su vida. Era raro de verlo salir en pantaloneta y camiseta de un entrenamiento, Pestanita salía como para irse de fiesta, eso le sirvió para ser llamado para un montón de publicidades. La verdad era el más aniñado de todos y sus compañeros lo aceptaban.

Una de las cosas que más destacaba en 'voz baja' era cuando salía en el diario, si la foto era buena, si estaba grande y sobre todo si era a color. En 1993 los deportes de EXTRA solo tenían las páginas centrales a full color.

En realidad a Morales se lo buscaba periodísticamente cuando la situación era dura, él era la voz ante el presidente Isidro Romero, siempre hablada de los temas delicados.

Entre bromas decía, que algún día iba a estar de nuestro lado: "Voy a ser periodista, pero no voy a venir a ver a estos $%/&/(& entrenar. Yo soy para estar en la televisión", en realidad nadie le creía, se pensaba que era una broma más de Morales, al final el tipo tenía razón.

SUS AMIGOS

De que era amiguero lo era, pero también se iba peleando con quienes no estaban de acuerdo a lo que él pensaba que estaba bien. El camerino era suyo. En 1993 en el adiós de Carlitos Muñoz fue el que más lloró, la cargó varias cuadras y llegó a la morada final cargando al Frentón.

Era muy celoso con su puesto, no le daba chance a nada ni a nadie, solo las operaciones lo sacaron del equipo y cuando lo despidieron del Barcelona, ese fue uno de los peores dolores que tuvo en la vida.

Hay un detalle que hizo que a Morales sus ex compañeros lo quieran más. Cuando llegó de asesor deportivo en la prefectura de Jimmy Jairala creó las escuelas de fútbol y buscó a sus ex compañeros muchos de ellos no tenían trabajo y los hizo entrenadores en varios cantones del Guayas, la banda de amigos y ex compañeros de Morales 20 años después se volvía a unir, claro que después se distanció de algunos. Morales era el tipo ideal para una entrevista, aportaba con buenas respuestas, a las chicas en los 80 y 90 cuando no habían celulares adornaban sus cuadernos con fotos que salían en los diarios de él.

Si las redes sociales habrían existido en los 80 y 90, seguro que Morales era un influencer más. Así era Morales y por eso era Morales.