Mejorar el cuestionado rendimiento deportivo será el objetivo de Barcelona que este martes 2 de abril, a partir de las 17:00, debuta en la fase de grupos de la Copa Libertadores ante Cobresal, de Chile. El Ídolo del Astillero se enfrenta a un equipo que atraviesa un presente adverso en el torneo local, pero también debe lidiar con otro rival del que se habla poco: los efectos del desierto de Calama.

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Los amarillos deberán estar en plena forma en el estadio Zorros del Desierto. Este recinto, ubicado a 2.300 metros de altitud en Calama, una ciudad en medio del desierto que lleva el mismo nombre, presenta otro desafío. “La altura se siente, pero de manera diferente. En Quito, por ejemplo, es una altura agradable debido a la frescura del frío; en cambio, Calama es más caluroso por su desierto, con un ambiente gris por las minas de cobre alrededor”, señaló Flavio Perlaza.

En conversación con EXTRA, el histórico zaguero de Barcelona rememoró anécdotas de cuando jugó en este escenario deportivo en la Copa Libertadores de 1982. Reconoció que ahora hay una mejor preparación para las condiciones climáticas, pero advirtió que el técnico Diego López debe intervenir para mejorar el sistema defensivo, especialmente los centrales.

“Durante el calentamiento, nuestro marcador Gil Nazareno tuvo problemas para respirar. Lanzaron un pelotazo hacia esa zona y él no pudo reaccionar. Nuestro masajista corrió al camerino para asistirlo y él tampoco regresó. Ambos tuvieron que recibir oxígeno y no volvieron más”, recordó Perlaza sobre el fatídico 3-0 en la fase de grupos, el 7 de septiembre de 1982.

Cuarenta y dos años después de ese episodio, el Fantasma afirma que la preparación ha evolucionado y que Barcelona tiene la calidad de jugadores para conseguir su primer triunfo en tierras araucanas.

“Ahora el fútbol está casi a la par, no hay muchas diferencias entre el fútbol chileno y el nuestro, antes era abismal. Barcelona tiene que jugar el partido con inteligencia, sin esconderse y con una dinámica que controle el ritmo del partido”, expresó.

Perlaza expresó que el estratega Diego López debe idear un esquema que impida que el rival llegue a zona de peligro, porque los zagueros del Ídolo hasta ahora “han dejado mucho qué desear”.

“Los equipos rivales se están dando cuenta de que los zagueros centrales son lentos. Los atacan por el centro y están dando mucha ventaja. Ante Macará, Orense e Independiente del Valle ya lo han sufrido. Si Diego López no cambia a los centrales, va a tener muchos contratiempos. Los que tiene dejan mucho qué desear por ahora”.

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Con apenas 2 empates y 4 derrotas en 6 partidos, Cobresal ha caído al último lugar de la clasificación del torneo local. 

“Es un momento duro, difícil, cuesta salir de estas instancias. Pensábamos que después del partido contra la U de Chile vendría la recuperación, pero nos encontramos con esta dolorosa derrota”, afirmó el técnico Gustavo Huerta, quien esta noche aspira a darle la primera alegría a su hinchada en 2024.

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