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Cuando vivió en Catar, el Demoledor Carlos Tenorio, recibió un Lamborghini de obsequio.Cortesía

¡Carlos Tenorio, de Demoledor a Embajador de Catar!

El mundialista nos habla desde la rica comida catarí hasta lo que no se puede hacer en la tierra del Mundial.

Catar para el mundialista Carlos Tenorio es su segunda patria, pues su paso por el Al-Sadd marcó una etapa en su vida. Hace cinco meses estuvo en el país del Mundial y ya prepara maletas para en las próximas semanas volver a Doha.

Es que Catar para Tenorio tiene un significado tremendo, fue el país del Medio Oriente donde le fue mejor.

Cuando se supo que Ecuador estaría en el mismo grupo de Catar, el corazón del Demoledor se aceleró y una película pasó por su mente. “Lo primero que deseo hacer es servir a los ecuatorianos que vayan a Catar, en lo que pueda ser útil me gustaría dar la mano”, expresa Carlos.

TODO ES NUEVO

Carlitos, como muchos le dicen, cierra sus ojos y habla de lo que sentirán los ecuatorianos que van a ir por primera vez a Catar.

“Que vayan con todas las ganas, desde la gastronomía que se maneja, hay una comida deliciosa y de seguro no van a extrañar en nada a la ecuatoriana. Les prometo que el majboos es una delicia, es un arroz con pollo o cordero, a un nivel gigante digno de un ecuatoriano mundialista; o una kunafa con queso”, describe Tenorio, que nos hace abrir el apetito antes de hora.

El exjugador dice que todo lo que vean en Catar les va a sorprender, porque se darán cuenta de que ese país fue hecho de la nada y que la imaginación de su gente no tiene límites.

Carlos Tenorio estuvo seis años en Catar.Christian Vinueza

DOS LAMBORGHINIS

Hablar de Catar para Tenorio es recordar los regalos que le daban los príncipes, como el Lamborghini celeste que recibió. Lo que pocos saben es que le tocó ir a buscar en una tienda de juguetes ese carro del mismo color para su hijo. De manera que en su casa había dos ‘Lambo’: el de verdad y el de juguete.

LO MEJOR DE TODO

Por ahora, todo lo que vaya en favor de los ecuatorianos, Tenorio lo hará por su cuenta. Ya tiene en su cabeza el diseño de una camiseta que será mitad de Catar y mitad de Ecuador.

En el próximo viaje se traerá una docena de camisetas para confeccionarlas.

GENTE BUENA

Para Tenorio, los cataríes son su familia. “Así como a nosotros nos llama la atención su vestimenta, idioma y tradiciones, lo mismo pasa con ellos. No se extrañen de que en las próximas semanas vengan muchos cataríes a Ecuador a buscar nuestras historias, costumbres. Porque todo lo que es Ecuador a ellos les llama la atención”.

Sobre el tema de la religión y los rezos de las personas que viven en Catar, dice que solo una cosa no deben de hacer los que vayan a viajar: pasarse por delante de quienes están rezando.

SOÑAR CON TODO

En el tema futbolístico, Tenorio manifiesta que se imagina una fiesta gigante, sobre todo en el partido ante Catar. “Eso va a ser inolvidable. Imagínate al país anfitrión dando todo para este encuentro y los ecuatorianos recibiendo el cariño y afecto. Va a ser una fiesta de esas que nunca olvidaremos, solo de imaginarlo estoy feliz. Catar es mi segundo país, por todo el cariño y afecto que me dieron y les di. Lo bueno es que han pasado los años y nunca se perdió el contacto”, indica un emocionado Tenorio, con la camiseta del anfitrión del Mundial.

Carlos dejará de ser el Demoledor para ser el Embajador.