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Se las buscaron para dirigir fuera del país
Octavio Zambrano, Alfredo Encalada y Carlos Sevilla, son algunos de los pocos técnicos locales, que han manejado algún club o selección del exterior
El fútbol ecuatoriano ha tenido pocos entrenadores que han logrado llegar al exterior. EXTRA te cuenta la historia de tres de ellos y lo que experimentaron en estos desafíos.
En la Tri, Alfredo Encalada fue asistente de Dusan Draskovic, Francisco Maturana y Hernán Bolillo Gómez. Además dirigió los combinados juveniles de Ecuador. Carlos Sevilla estuvo en el combinado ecuatoriano y fue campeón con equipos nuestros. Y Octavio Zambrano fue parte de la selección de Canadá. Ninguno de ellos está activo actualmente en la LigaPro.
"Me gustaría dirigir la selección de mi país"
Octavio Zambrano es uno de los pocos técnicos ecuatorianos que cuentan en su hoja de vida con una larga lista de clubes a los que ha podido dirigir en el exterior.
El DT, de 62 años, se ha dado el lujo de manejar a cinco equipos de Estados Unidos, uno de Moldavia, uno de Hungría, tres de Colombia, dos de Ecuador e incluso a una selección nacional: la de Canadá.
Pese a esa dilatada carrera, que inició en 1993 con el desaparecido Los Ángeles Cobras de la MLS, Zambrano no ha podido triunfar en su propia tierra, pues en Ecuador apenas ha dirigido a El Nacional y Delfín.
En cuanto a su éxito, en relación al resto de colegas ecuatorianos, el exentrenador de los militares sostuvo que la clave radica en la formación que recibió en Estados Unidos.
“En 1979, cuando jugaba para el desaparecido Valdez, recibí una beca de estudios en una universidad de California. Allá jugué para la universidad y luego en Los Ángeles Lazers. Pero me retiré de jugar profesionalmente dos años después, pues sentía que la formación de jugadores era lo mío”.
Zambrano indicó que el llamado a la dirección técnica se dio gracias al conocimiento que había adquirido de los técnicos europeos que lo dirigieron.
“A mi llegada a Estados Unidos tuve como técnicos a algunos ingleses, de ellos aprendí mucho. La forma de trabajar era muy distinta a la que había estado acostumbrado en Ecuador y eso despertó mi pasión por ser técnico”.
“La verdad, no me quejo. Mi carrera deportiva ha estado llena de buenas experiencias. La perseverancia en el trabajo es lo que me ha dado la oportunidad de llegar lejos”.
Sobre haber dirigido al combinado canadiense, Zambrano explicó que esta fue una de sus mejores experiencias.
“Me siento satisfecho de que pude alcanzar el reto de dirigir una selección nacional. Aunque la verdad es que espero algún día dirigir al equipo de mi país. Pero mi llegada a Canadá se dio luego de que la dirigencia analizó mi carrera. Estaban buscando un DT que conozca el medio y para ellos lo más importante fue que cuando estuve en LA Galaxy en 1999, pudimos ser el primer equipo en llegar a una final de la Copa de Campeones, que disputamos ante Cruz Azul. Mi carpeta se impuso a la de cinco técnicos, entre europeos y sudamericanos”.
"Allá tratan mejor a sus DT que en Ecuador"
Corría el 2002 y Alfredo Encalada iba a tener una propuesta que le cambiaría la forma de ver el balompié como entrenador. Adaptado a su ideología y a lo aprendido con Dusan Draskovic, Francisco Maturana y después con Hernán Darío Gómez, el DT tricolor llegó al Dragón de El Salvador y se encontró con otra realidad.
“Estuve en la ciudad de San Miguel, que era muy calurosa, y fui a ver el partido del equipo, que perdió 5-1 de local. Me puse a pensar en dónde me había metido y me di cuenta de que estaba complicada la cosa”, relató entre risas.
Encalada encontró en esta liga mucha consideración al técnico local, algo que le sorprendió y que desearía que suceda en Ecuador.
“Cuando yo llegué tuve que esperar dos semanas para que la asociación de técnicos me califique, porque ellos no permiten que cualquier extranjero dirija en su país. Yo llegué para entregar mi documentación y me pedían papeles originales y una certificación de la FEF por haber dirigido la selección. Mi esposa tuvo que viajar y sacar el diploma de la pared para que me aprueben”, recordó.
En su debut su club goleó 5-0 y los medios hablaron muy bien de él. Se adaptó a muchas cosas, al estilo de juego, al futbolista, “que es muy trabajador y respetuoso”, e incluso a la comida. En un entrenamiento, tres de sus jugadores frenaron todo para ir a atrapar una iguana.
“Allá eso era muy común, eran situaciones a las que a mí me tocaba adaptarme y hasta cierto punto eran peculiares”, agrega.
Pese a que logró salvar al club del descenso, la experiencia de Encalada tuvo que terminar por el cambio de dirigencia en dicho club.
"Me tocaba sacarlos de las discotecas"
Carlos Sevilla es uno de los entrenadores ecuatorianos con más clubes dirigidos a nivel local; pero aunque usted no lo sepa, tuvo una experiencia en el Cienciano de Perú.
Sevilla recientemente había salido campeón con Emelec y, luego de su paso por Macará y El Nacional, se dirigía hacia su nuevo rumbo, y aunque tuvo un comienzo promisorio, el duelo por Copa Libertadores en 2005 contra Chivas de Guadalajara lo marcó.
“En Cienciano el problema fue que una vez que queda campeón de la Sudamericana, vende a siete jugadores y me toca hacer una reestructuración. Nos estaba yendo bastante bien”, relata.
“Después nos tocó jugar Copa contra las Chivas y ahí fue bastante difícil. Mucho tuvo que ver Héctor Baldassi, el árbitro central, porque mientras íbamos cero a cero uno de mis jugadores quiere hacer un cambio de frente y le pega en la nalga a Baldassi y el rebote le queda servido para un jugador de las Chivas y nos puso la cosa cuesta arriba”.
Sevilla explica que no fue fácil controlar a los jugadores y tenía que ir a sacarlos de las discotecas.
“La parte disciplinaria era lo más difícil de controlar. Menos profesionalismo que en Ecuador. Los visitaba de sorpresa, no solamente una sino varias veces. Hacíamos el seguimiento del caso, lo buscábamos y lo mandábamos a dormir. No solo de las fiestas me tocó sacarlos, sino de las discotecas”, agregó.
Sevilla dejó el club en poco tiempo por el cambio de dirigencia y volvió a Ecuador.