Empezaron con todo. Barcelona no perdonó este jueves 7 de abril a Montevideo Wanderers de Uruguay en el debut de la Copa Sudamericana 2022 luego de vencer por un contundente 4-2 en el estadio Monumental de Guayaquil.

Con dos goles de Gonzalo Mastriani (9' y 11'), otro de Michael Carcelén (34') y uno olímpico Damián 'El Kitu' Díaz (54') el equipo torero dejó en claro que tras su pronta eliminación en la Copa Libertadores, llega a este segundo torneo internacional con hambre de gloria. Los tantos del equipo visitante llegaron por intermedio de Hernán Riveros (14') y Mauro Méndez (61').

Desde los albores del cotejo, el elenco dirigido por Jorge Célico, demostró saberse muy bien el guión a seguir con tres jugadores de centrales que le dieron fuerza y amenazaron de entrada el arco rival defendido por Ignacio De Arruabarrena.

Cuando transcurría el minuto 9, un centro de Pedro Pablo Perlaza por la banda derecha llegó a los pies de Gonzalo Mastriani, quien no perdonó y abrió el marcador con el 1-0.

Conforme pasaron los minutos, el juego canario se fue asentando aún más. Producto de ello el mismo Mastriani, mostró seguir enchufado y dos minutos mas tarde, tras una jugada que nació en los pies de Adonis Preciado y que cedió a Damián Díaz, cayó en su domino para poner el 2-0.

Aunque el equipo visitante tuvo varios chispazos, estos no fueron contundentes y permitieron seguir el dominio de Barcelona.

A los 14 minutos, en un descuido de la defensa amarilla, Hernán Rivero, en una de las únicas llegadas al arco canario que tuvieron en la primera mitad los uruguayos, definió el descuento. Sin embargo solo fue ese momento.

Ya al minuto 34 Michael Carcelén puso la tercera en un partido que fue enteramente amarillo.

En la etapa de complemento, los dueños de casa siguieron atentando en el área rival, muestra de ello uno de los defensas de Montevideo Wanderers en su afán desesperado por sacar el balón cometió una falta penal al minuto 48 que cobró El Kitu Díaz, pero que para su desgracia falló tras enviar el balón directo a las manos de Ignacio De Arruabarrena.

?Sin embargo, el tiempo le iba a dar a Díaz la revancha al cobrar un tiro de esquina al minuto 54, mismo cuya trayectoria fue perfecta y cayó directo en las redes del rival.

En otro de esos pasajes escasos, Wanderers, con Mauro Méndez como abanderado, llegó a arco rival y puso el segundo tanto uruguayo a los 61'.

Con fútbol de ida y vuelta, los equipos no se hicieron más daño y cerraron un 4-2 que reforma la imagen dejada por el Ídolo en Copa Libertadores al ser eliminado tempranamente. La Sudamericana es su nueva chance.