Barcelona, cuyo único objetivo es triunfar en lo deportivo, ha quedado atrapado en medio de una pelea judicial, que ha sido impulsada por el socio del Ídolo, Carlos Nahón, para que el Ministerio del Deporte inscriba al directorio de Antonio Álvarez, pese a que no cumpliría con la Ley del Deporte.

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Primero, Carlos Alfaro Moreno, quien el 24 de octubre de 2023 presentó su candidatura para ser reelecto, dos días después declinó su postulación, por un impedimento en la ley, ya que esta establece que los directivos deportivos pueden optar por la reelección una vez.

De acuerdo al artículo 151 del reglamento, Alfaro Moreno no podía participar, debido a que de 2015 a 2019 fue vicepresidente del directorio de José Francisco Cevallos y entre 2019 y 2023 cumplió funciones como presidente.

Por esto, Alfaro Moreno dio un paso al costado y cedió su puesto a Antonio Álvarez.

El 27 de octubre apareció Nahón con una acción de protección solicitando que se acepte la candidatura de Álvarez y se desestime la de Rafael Verduga, la cual procedió y fue suscrito el 31 de octubre por la jueza Andrea Moreno.

Verduga apeló ante el Tribunal, pero la Procuraduría General del Estado emitió un informe el 6 de noviembre explicando que su candidatura incumple el artículo 151 de la ley.

La lista de Álvarez era la única opción, por eso el Tribunal la anunció como la ganadora el 8 de noviembre, luego de basarse en el art. 83 del Estatuto del club: “Si solo se presentare o quedara como válida una única lista candidata, el Tribunal la declarará ganadora”.

La lista de la continuidad celebró y el 13 de diciembre, en un acto realizado en el estadio Monumental, Álvarez fue posesionado. Sin embargo, el Ministerio no aceptó su inscripción.

El 14 de diciembre se ingresó la petición suscrita por Álvarez, que revisó la Dirección de Asuntos Deportivos. Pero, el 19 del mismo mes, emitió el comunicado pidiendo que subsanen ocho peticiones del documento que enviaron.

Entre las observaciones, pidió el acta de la Asamblea de Elecciones del 1 de noviembre de 2023, la calidad de los dirigentes José Nogales, Francisco López y Antonio Álvarez, quienes constan como miembros del club Torero, y las razones por la cual el Tribunal aceptó esta comitiva.

Previo a que terminara el tiempo estipulado, el 3 de enero Nahón apareció con otra acción de protección. En esta demandó que el Ministerio inscribiera la comitiva de Álvarez y se abstenga de comentar sobre los puntos que subsanó este grupo. El juez Josafat de Jesús Mendoza aceptó las medidas.

La audiencia de apelación se debía instalar el viernes 12 de enero de 2024, pero el solicitante de la acción de protección, Nahón, pidió una prórroga porque no tenía un abogado. El juez aceptó la solicitud y fue reprogramada para el 19 de enero.

- EL EQUIPO ES EL PERJUDICADO

EXTRA en anteriores publicaciones expuso con opiniones de especialistas que esta situación podría traer problemas en lo deportivo a Barcelona.

La abogada Mariela Díaz explicó que las reglas internas de un equipo no están por encima de la Ley del Deporte, que requiere que se celebre una asamblea de elecciones.

“El artículo tres tipifica que el club se somete a las reglas del Ministerio. Este directorio no puede ser registrado, al no constar la asamblea”, dijo.

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Por su parte, el socio José Jorgge declaró que los amarillos podrían ser descalificados de la Copa Libertadores.

“Si el directorio de Álvarez se mantiene por una orden judicial, tengan la seguridad que los rivales en la Libertadores van a reclamar porque no cuenta con una directiva debidamente inscrita”, agregó Jorgge.

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Incluso, el jurista Juan Ycaza, representante de los socios amarillos que aplicaron el ‘amicus curiae’ para estar en el proceso, opinó que los contratos de los fichajes presentados por Álvarez no son válidos.

“Todos los contratos suscritos por Álvarez son nulos y si su directorio no es inscrito en el Ministerio se quedarán en esa figura. No tengo idea cómo los están validando, pero estos solo los pueden firmar los directorios que están inscritos en el Ministerio”, dijo Ycaza.

Y agregó: “Todo esto es malo para el equipo y le puede traer problemas en la FIFA y Conmebol. Si Barcelona tiene una directiva mal inscrita, por esta razón le pueden quitar la licencia de clubes y no podrá participar en ninguna competencia oficial este año”.

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