Exclusivo
Deportes
Armando Matute: la historia del triatleta ecuatoriano que 'burló' a la muerte
El deportista fue diagnosticado con una enfermedad en sus pulmones. Fue operado y está volviendo a entrenar para aspirar a un cupo en París
Pasaron tres meses desde que una operación, debido a un colapso pulmonar, cambió la vida de Armando Matute. El triatleta tricolor estaba en el punto más álgido de su carrera, pero esta afección le impidió representar al país en los Juegos Panamericanos de Chile.
El 31 de octubre de 2023, a dos días de su puesta en escena en Viña del Mar, el deportista sintió un dolor inusual en el pulmón. Al poco tiempo de comenzar un masaje rutinario, su voz se desvaneció. Tuvo limitaciones al respirar.
¿El motivo? Un neumotórax espontáneo, una enfermedad que puede surgir desde el nacimiento y se produce cuando el aire se filtra entre los pulmones y los comprime con la pared torácica.
Nacido hace 29 años, Matute pertenece al Plan de Alto Rendimiento y ha triunfado en múltiples carreras nacionales e internacionales en la disciplina que comprende nado, ciclismo y carrera a pie.
(Le puede interesar: Preolímpico de Francia 2024: Ecuador se ilusiona con las olimpiadas)
EXTRA se contactó con el guayaquileño para conocer cómo avanza su recuperación y sus problemas físicos y anímicos, a raíz de la intervención quirúrgica que lo alejó de su tercera cita panamericana.
“Si me daba en algún punto de los Juegos, probablemente me hubiese muerto. Habría sido letal si eso se reventaba nadando, a una intensidad respiratoria muy alta; o en bicicleta, a una velocidad de 50 o 60 kilómetros por hora”, confesó.
No obstante, al ser un atleta de élite y contar con una condición física superior a la media poblacional, su problema, visiblemente, no fue tan grave.
- UN DURO MOMENTO
Postrado en una cama del Hospital del Trabajador por cinco días y recibiendo el minucioso cuidado de su novia Cynthya Padilla, que gracias al apoyo de la Federación de Triatlón viajó a tierras araucanas, Armando recordó lo difícil que fue apreciar por televisión la carrera.
“Saber que te preparas tanto para representar a tu país en un evento de tal magnitud y no competir fue durísimo. Vi la competencia de mujeres porque iban primero. En la de los hombres, como estaba débil, me quedé dormido. Son cosas que suceden y que no tienen mucha explicación. He tratado de no pensar en eso porque te golpea a nivel físico y emocionalmente”, relató.
- LA RECUPERACIÓN
Toda esta situación provocó un quebranto en su salud mental. Armando comenzó a asistir al psicólogo debido a un estrés postraumático. Ahora aseguró sentirse mejor.
“Hay que aprender a procesarlo, por eso creo que el deporte me lo ha dado todo. Estudié becado en el colegio y la universidad. Además, mi ropa, mi celular, mi carro y hasta mi novia los he conseguido por el deporte. Esta vez tengo que reconocer que también me salvó la vida”, manifestó.
Hablar de sus primeros días de recuperación es un tema que prefiere evitar. Después de su operación en Chile y de haber aterrizado en su natal Guayaquil, el deportista estuvo tres semanas paralizado, tiempo que para él fue una eternidad.
“Sentí que fueron meses. Al inicio no lograba encontrar una sinergia de lo que sentía y pensaba. Empecé a entrenar el 19 de noviembre y hasta el 31 de diciembre había días que le agarraba fastidio”, mencionó.
Añadió que gracias a las terapias y la disciplina en cada práctica, “la data de los entrenamientos ya va más acorde a lo que era. Es un poco satisfactorio porque a pesar de esta condición me estoy sintiendo mejor”.
El deportista entrena a diario a las órdenes de Francisco Tirado, quien es su amigo y mentor. Le da consejos y supervisa que sus marcas regresen a los registros de cuando Armando era el virtual clasificado por Ecuador, del ranking mundial rumbo a París 2024.
(Lea también: Barcelona: Francisco Fydriszewski afina la puntería)
Armando cuenta los días para volver a competir y ya se alista para la Copa Continental de Triatlón de distancia olímpica en La Guaira, Venezuela, que será el 11 de febrero. “Tengo hasta mayo para conseguir los puntos que me hacen falta para clasificar. La primera (competencia) sería en Venezuela, luego en Cuba, y si no, será en Miami en marzo. En la que me sienta apto estaré”, sentenció.
- Mantiene firme el sueño olímpico
El triatleta considera que el país carece de una cultura que reconozca al deportista que llega a unos Juegos Olímpicos. “Ser campeón olímpico es lo máximo que uno puede conseguir y en países como nosotros las personas no lo valoran porque creen que las entidades nos pagan y vamos a pasear”.
“El objetivo es clasificar a París, pero no contaba con el tema de la operación. Es una meta que se me alejó un poco. No quiero decir que no lo voy a lograr... la esperanza y la fe las mantengo”, confiesa Armando, que no resigna el sueño de clasificar a su primera cita olímpica.
Sin embargo, no quiere autoimponerse presión ni dejar que ese posible tropiezo lo frustre. “Ya no pienso que los Juegos Olímpicos lo sean todo. Ya no dejo que eso me perturbe la cabeza ni me haga creer que mi carrera no ha sido tan satisfactoria como realmente lo es”, reflexiona el deportista, que ha pisado 29 países representando la bandera tricolor.
Para contenido exclusivo: SUSCRÍBETE AQUÍ