En menos de una semana el argentino Gustavo Alfaro ha hecho lo que Hernán Darío Gómez y Jordi Cruyff no pudieron hacer cuando estuvieron al frente de la Tricolor: meterse a la afición ecuatoriana en el bolsillo.

Alfaro, quien fue presentado hace once días, ha utilizado un discurso de optimismo y esperanza como su principal arma para crear un buen ambiente en el entorno de la selección.

Eso no sucedió con sus dos antecesores, pues para recordar, el Bolillo fue duramente criticado al indicar que Ecuador “iba a ir a aprender a la Copa América (Brasil 2019)”, mientras que Cruyff recibió ‘palo’ al demostrar poco interés por el cargo que la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) le encomendó en enero pasado.

Para el psicólogo deportivo David Yánez y para el exjugador de selección Alfonso Obregón, Alfaro ha manejado un discurso positivo, que le ha permitido calmar el ambiente negativo que hace poco envolvió a la FEF y la Tricolor.

Un impacto positivo

“Psicológicamente el discurso de Alfaro tiene un impacto positivo, no solo para los jugadores, sino para la afición ecuatoriana. El técnico ha logrado transmitir seguridad y ha demostrado que está comprometido con su trabajo en Ecuador”, opinó Yánez.

Obregón indicó que es importante que un técnico tenga como fortaleza la comunicación y motivación, pues de esa forma se gana la confianza de los jugadores.

“No digo que con su discurso vayamos a clasificar al Mundial de Catar, o que vayamos a ganar la Copa América (2021), pero Alfaro ha transmitido optimismo, algo que por lo menos no se vio en Jordi Cruyff”, sostuvo el exvolante.

Obregón comentó que se sorprendió cuando escuchó al Bolillo Gómez indicar que Ecuador aún está en fase de aprendizaje. “Creo que esa frase lo condenó. Me sorprendió, porque él es un motivador y la última vez que estuvo en el cargo no lo vi en esa postura. A Alfaro sí lo veo preocupado por generar un buen ambiente”, finalizó.