Algo muy común, pero de lo que se habla muy poco es la serie de problemas de fertilidad que tienen las parejas,  además de la pasión desenfrenada que se puede perder con el tiempo. Por ejemplo,personas que desean tener un hijo, pero que no pueden pese a todos los intentos, métodos e insistencias.

 Es así que surgen, a lo largo de los años, lugares que se convierten en verdaderos centros de peregrinación en busca de placer sexual y fertilidad. Dos de ellas: las islas de Stromboli y Filicudi, en Sicilia, Italia.

A Stromboli y Filicudi se les conoce como los atolones de fertilidad. Cuentan con características que invitan a creer en esta fama cultivada por los locales y visitantes.

En resumen: estos lugares, se asegura, son los ideales para quienes quieran recuperar esa llama perdida en las relaciones.

Los residentes dicen que las islas se han convertido en puntos de "peregrinación sexual" debido a su supuesta capacidad para aumentar la libido. Aguas termales, cuevas y flores con fragancias acogedoras (una de ellas, el Cestrum nocturnum, o dama de la noche, tendría propiedades que encienden la pasión y aumentan la fertilidad) son ingredientes de lo que se llama el "cóctel orgásmico" de las islas. Especialmente en Stromboli, que tiene un volcán activo todo el día y eso se puede comprobar en cualquier momento.

El agua subterránea que hierve bajo el volcán penetra las estructuras de cemento y piedra manteniendo la superficie cálida, día y noche. Esto lleva a los visitantes a quitarse la ropa durante la caminata de ocho horas hasta la cima. Muchos se tumban en el suelo para sentir mejor la vibración de la tierra.

La vibración es más que una metáfora. El movimiento, dicen los vecinos, es una invitación al placer . Ayuda que las erupciones de Stromboli sean frecuentes: una cada 15 minutos.

Además, algunos pescadores organizan excursiones en barco a una roca llamada La Canna, debido a su forma fálica. Se dice que las mujeres jóvenes que acarician la roca y dicen una oración tienen más probabilidades de encontrar el amor.