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La ergofobia o miedo al trabajo puede llegar a altos niveles de ansiedad e incluso convertirse en una crisis de pánico para quien la padece.Internet

Ergofobia: cuando el miedo a trabajar se apodera de ti

La ergofobia o miedo al trabajo es un tipo de trastorno de ansiedad social que experimenta una persona cuando tiene que acudir y permanecer en su lugar de trabajo.

Cualquier persona que está en sus primeros días de trabajo puede sentirse nerviosa, insegura, o con cierto temor a cometer errores; esto suele ser normal pero pasajero.

Sin embargo, cuando este miedo dura demasiado tiempo y no te permite cumplir con normalidad la actividad laboral podría tratarse de algo serio; quizás estés padeciendo de ergofobia.

La ergofobia o miedo al trabajo es un tipo de trastorno de ansiedad social que experimenta una persona cuando tiene que acudir y permanecer en su lugar de trabajo. Este temor puede llegar a altos niveles de ansiedad e incluso convertirse en una crisis de pánico para quien la padece.

Las causas que la originan no solo dependen de la actitud de la persona, sino también de las experiencias negativas que haya pasado durante su vida; carrera profesional; o en su trabajo actual, según sea el caso.

También puede afectar a quienes nunca antes han trabajado en su vida. Entre las causas principales que activan esta fobia están:

- El miedo al rechazo.

- Personalidad ansiosa.

- El acoso laboral o intimidación por parte de algún compañero.

- Falta de herramientas para afrontar el estrés.

- Trabajo sin motivaciones.

- Discrepancia entre el número de tareas y horas obligadas a permanecer en el puesto de trabajo.

- Discusiones recurrentes con los superiores.

En casos extremos, conduce a la persona a ausentarse del trabajo durante muchos días, especialmente dependiendo de las exigencias del puesto. Esto aumenta aún más su miedo a enfrentarse a situaciones ‘complicadas’ en el trabajo.

¿Qué otros síntomas pasan las personas ergofóbicas? Inicia con lo más básico: simplemente la idea de ir al trabajo es suficiente para causar un ataque de pánico completo.

Asimismo, el rendimiento laboral disminuye; acumula el trabajo y el funcionamiento laboral no es óptimo; y tiene más problemas con compañeros y/o superiores debido a la falta de comprensión y atención de las tareas asignadas.

Los inconvenientes laborales van en aumento y no terminan ahí; también se ven afectadas las relaciones personales y familiares:

1) Irritación fuera del trabajo: El estrés impide a la persona acabar su jornada laboral y desconectarse. Esta irritación afecta a sus relaciones sociales y familiares.

2) Susceptible ante las críticas: Los comentarios de compañeros son interpretados negativamente o como un ataque personal, incluso aquellos que buscan mejorar la calidad del trabajo.

3) Aumenta el miedo al comenzar la semana: Previo a iniciar una nueva semana laboral, se sienten abrumados; la sensación de desesperanza y ansiedad se apodera de ellos/as, independientemente de los planes que puedan surgir.

4) Inseguridad: Suelen estar inseguros de lo que hacen en el trabajo y presentan muchas dudas acerca de la calidad de sus ejecuciones, incluso, se les olvida lo que estaban haciendo y no pueden recordarlo.

5) Comportamientos poco comunes: La ansiedad provoca tensión y la rigidez en su forma de actuar con compañeros y jefes se hace evidente. Las incoherencias al hablar y silencios cuando hay que decir algo también son frecuentes.

¿Cómo afrontarla?

Las consecuencias en el ámbito laboral, personal, social y familiar antes mencionados pueden ‘acabar’ con una persona si la ergofobia no se detecta y se trata a tiempo.

Entre los consejos básicos que pueden ayudarte a superar este inusual miedo a ‘camellar’ están: detectar el problema, comprenderlo, y normalizarlo; aprender técnicas de relajación, como el yoga o la meditación; buscar un apoyo emocional en tus compañeros; entre otros.

En casos de que no puedas con esta fobia, solicita ayuda psicoterapéutica a un psicólogo especializado en trastornos emocionales para cumplir una terapia cognitivo-conductual.

En ellas enseñan diferentes técnicas para controlar el miedo a ir a trabajar y a desarrollar estrategias para afrontar los síntomas que se presentan.