En esta temporada reapareció la preocupación por la transmisión de la leptospirosis, enfermedad zoonótica de la que el Ministerio de Salud Pública reportó 54 pacientes en el país, hasta el 12 de marzo de 2023. La provincia del Guayas registraba 31 contagiados.

La infectóloga Carmen Soria Segarra indica que la bacteria que produce la leptospirosis puede “vivir en cualquier mamífero, en cualquier animal de cuatro patas. Vive en el riñón sin causar mayor enfermedad, pero la puede eliminar por la orina”.

El problema es que el pis de algún animal portador puede ser arrastrado por la lluvia o mezclarse cuando existen inundaciones y transmitirse a otros animales y a personas.

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La bacteria de la leptospirosis, según difundió el Sistema de Vigilancia Epidemiológica, puede sobrevivir desde semanas hasta meses en el agua y la tierra contaminada con la orina de los animales, por lo cual la sanidad se vuelve elemental.

Carmen Soria señala que para los animales sí existe vacuna contra la leptospirosis. En cambio, para el ser humano no, por ello puede contagiarse.

“Las familias que tienen sus mascotas con todas las vacunas, no deberían tener problemas”, advierte la especialista.

En el caso de las personas que viven en el campo y tienen animales o criaderos de cerdos, por ejemplo, deben vacunarlos y cuidar la higiene.

Al hacer la limpieza de las excretas de los animales deben usar protección en manos y pies, evitando tener contacto con agua, posiblemente contaminada con su orina.

Uno de los principales transmisores de la bacteria de la leptospirosis es la rata, por lo cual se debe eliminarlas.

La leptospirosis tiene dos fases:

1 (primera semana).- El paciente puede tener fiebre, que incluso podría pasar desapercibida.

2 (segunda semana).- También hay leptospirosis icterohemorrágica, que es la que puede producir todos los síntomas graves y llegar a matar. En esta fase el paciente se pone amarillo. Empiezan los daños en los riñones y hasta podría haber sangrado.

Cuando la persona presente síntomas, debe acudir al médico para que le realicen exámenes y tener certeza del contagio, pues los malestares de la leptospirosis son similares a los de otras enfermedades que se presentan en temporada de lluvia, como el dengue u otras infecciosas.

Es importante diferenciar las enfermedades, “porque la leptospirosis requiere de tratamiento antibiótico, a diferencia del dengue, cuyo manejo es más que nada de hidratación”, especifica la infectóloga.

Las bacterias pueden ingresar al organismo de una persona si esta tiene contacto con líquido contaminado, por ejemplo a través de alguna lesión en los pies (ampollas, uñeros).

Unos autores señalan que la bacteria entra al cuerpo de los caninos por la piel, pero también por las mucosas, cuando estos olfatean y lamen superficies contaminadas.

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