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Psicología: Las emociones y cómo manejarlas con inteligencia
Esta habilidad psicológica puede aprenderse en la etapa escolar. Su aplicación trae resultados positivos para su entorno
E n la búsqueda constante de la innovación y mejora de la educación, poco a poco se ha ido implementando la enseñanza de la inteligencia emocional durante la etapa escolar. Es que más allá de enseñarles a resolver problemas matemáticos, geografía y literatura (también materias claves en su aprendizaje), desarrollar la capacidad de comprender y manejar sus emociones es una habilidad fundamental para el éxito personal, social y profesional de los estudiantes.
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SEMANA conversa con Karen Villava, psicóloga y máster en intervención terapéutica infantojuvenil (Universidad Oberta de Catalunya), quien detalla qué es la inteligencia emocional y por qué es una poderosa herramienta para enfrentar los nuevos desafíos y retos.
A controlar las emociones
¿Qué es inteligencia emocional? La experta la define como la capacidad de identificar sus emociones y así gestionar sus acciones de manera adecuada.
“A los niños, desde edades tempranas, se les puede enseñar a manejar sus emociones para que, cuando tengan desafíos (por ejemplo, desacuerdos con sus compañeros), sepan reaccionar de manera efectiva”, dice Villalva, quien también es coordinadora del departamento de consejería estudiantil del Ecomundo.
Las estrategias
La psicóloga asegura que uno de los pilares para desarrollar esta capacidad es fomentar el autoconocimiento e identificar los estímulos que pueden hacerle perder el control.
Algunas de las estrategias para calmarse son los ejercicios de respiración, centrarse en el presente, soltar lo que no está en el control de uno mismo y hacer actividades recreativas que disfrute (como salir a caminar, pintar o hacer deporte).
Antes de reaccionar, ¡respire!
Es bien conocido que la manera en que se respira afecta todo el cuerpo. La meditación y los ejercicios de relajación ponen mucha atención en este punto, ya que hacerlo de manera profunda y completa es posible reducir la tensión y disminuir el estrés.
A la hora de controlar las emociones, la respiración es fundamental. Y este ejercicio es válido para personas de todas las edades, desde niños hasta adultos.
¿Cómo hacerlo? Inhale por la nariz contando hasta cuatro, retenga el aire durante cuatro segundos más y, finalmente, exhale lentamente por la boca durante otros cuatro segundos. Repita este proceso varias veces hasta que se sienta más calmado.
Debe saber
- La educación sobre la inteligencia emocional no debe limitarse al ambiente escolar. Es importante que los padres refuercen el aprendizaje de sus hijos en casa.
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