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el olor corporal cambia con la edad y que a partir de los 30 años es posible empezar a notar un fenómeno conocido coloquialmente como ‘olor a viejito’.freepik

El ‘olor a adulto mayor’: ¿Mito o realidad?

Un estudio sugiere que el olor corporal cambia a medida que envejecemos, pero los expertos tienen opiniones diferentes sobre esta condición

Cuando Natalia era niña percibía vívidamente el inconfundible olor que se desprendía de la piel de su abuela Anatilde. Cuando visitaba a sus amigos se daba cuenta que las personas mayores que vivían con ellos tenían un olor similar, aunque nunca idénticos.

A medida que Natalia crecía notó que este olor particular parecía repetirse en varios adultos mayores, lo que la llevó a cuestionarse si realmente existe el llamado ‘olor a viejito’.

Un estudio publicado en la revista californiana ‘Plos One’ sugiere que el olor corporal cambia con la edad y que a partir de los 30 años es posible empezar a notar un fenómeno conocido coloquialmente como ‘olor a viejito’. Este aroma puede variar según la percepción de cada persona, pero en términos generales es tan peculiar y característico como el del bebé recién nacido.

Según José María Antón, biotecnólogo a cargo de la investigación, a medida que las personas envejecen comienzan a liberar una molécula en la piel llamada 2-nonelal, que naturalmente oxida los ácidos grasos de la barrera lipídica.

Opiniones diversas

Christian Velásquez, especialista en endocrinología, respalda esta teoría de los ácidos y explica que dicho olor es una parte normal del proceso fisiológico del cuerpo humano.

“Este proceso comienza a manifestarse a partir de los 30 años y se intensifica después de los 60. Básicamente se debe a la oxidación de sustancias orgánicas grasas presentes en la piel y no guarda relación con los hábitos de higiene corporal”, afirma.

Sin embargo, varios expertos en salud tienen diferentes opiniones respecto a la información que ya ha ganado aceptación en internet y en las redes sociales. El endocrinólogo Carlos Solís sostiene que los olores corporales no están relacionados con la cantidad de grasa corporal, como indica el estudio, sino con las feromonas. 

"Básicamente se debe a la oxidación de sustancias orgánicas grasas presentes en la piel y no guarda relación con los hábitos de higiene corporal”, endocrinólogo Christian Velásquez.

“Más que desequilibrio hormonal, las personas poseemos un olor natural que es dado por las feromonas, secretadas a través de las glándulas sudoríparas y que han demostrado tener un impacto entre nuestra especie para la atracción, empatía y hasta el estado de ánimo”, asegura.

Por su parte, la doctora Gabriela Altamirano, especialista en geriatría y medicina interna, coincide con esta perspectiva. Argumenta que estos olores suelen ser resultado de enfermedades subyacentes, que pueden manifestarse a cualquier edad, no solo en la vejez. En este sentido, alguien con problemas hepáticos podría experimentar olores inusuales, independientemente de su edad.

“Estos olores se presentan por lo general debido a algún tipo de enfermedad subyacente, que puede ocurrir a cualquier edad, no solo en la avanzada. Así, alguien con condiciones hepáticas puede presentar olores poco usuales, independientemente de la edad que tenga”, asevera.

No estigmatizar

A pesar de las diferentes perspectivas, es importante destacar que la expresión coloquial ‘olor a viejito’ puede ser estigmatizante y ofensiva para algunas personas mayores, lo que podría generar problemas de autoestima e inseguridad.

No todos emiten un olor incómodo. Muchos adultos mayores pueden sentirse solos y pueden tener dificultades para mantener una higiene específica.freepik

Sonia Rodríguez, psicóloga clínica y directora del Centro Ecuatoriano para la Promoción y Acción de las Mujeres (CEPAM), subraya la necesidad de brindar un mejor trato y apoyo a quienes han acumulado más experiencias en la vida.

“No todos emiten un olor incómodo. Muchos adultos mayores pueden sentirse solos y pueden tener dificultades para mantener una higiene específica. Es importante que los ayudemos a sentirse parte del mundo, a través de pequeños gestos como comprarles ropa, cortarles el cabello o regalarles una crema hidratante para la piel”, enfatiza.

Hasta la fecha, este fenómeno no cuenta con una base científica sólida y existe una discrepancia evidente entre los profesionales de la salud. El olor corporal puede variar ampliamente de persona a persona y está influenciado por una serie de factores, como los cambios en la piel, los medicamentos, la dieta y la salud en general.

El debate sigue abierto y, aunque Natalia no llegue a conocer la respuesta, siempre recordará el aroma de la colonia ‘Jean Naté’, mezclado con el de la piel de su abuela. Esto nos recuerda mantener empatía, consideración y respeto hacia aquellos que nos dejan un legado de recuerdos, experiencia y sabiduría.

"Mantener un ambiente adecuado para prevenir problemas en la piel, como hongos o irritaciones en los pliegues, áreas genitales y pies, evitando el exceso de sudoración", geriatra Gabriela Altamirano.

Cuidando cuerpo y mente

La geriatra Gabriela Altamirano comparte consejos esenciales para cuidar la mente y el cuerpo de nuestros adultos mayores.

Destaca la importancia de mantener un ambiente adecuado para prevenir problemas en la piel, como hongos o irritaciones en los pliegues, áreas genitales y pies, evitando el exceso de sudoración.

Recomienda el uso de cremas hidratantes para prevenir la resequedad cutánea y subraya la necesidad de mantener una higiene adecuada, especialmente al utilizar el baño, ya que restos de fluidos pueden quedar impregnados en la ropa y objetos.

La especialista en salud mental Sonia Rodríguez asegura que es fundamental el acompañamiento por parte de la familia cercana. “Debemos recordarles que tienen recursos disponibles y que no necesitan salir solos o manejar por sí mismos. Pueden incluir acompañarlos a la peluquería o asistir cuando se cortan el pelo, lo que les brinda reconocimiento y apoyo”, puntualiza.

Muchas personas mayores tienen recursos limitados, por lo que regalarles actividades compartidas, como paseos al parque, asistencia a eventos culturales o salidas a cenar al aire libre, puede ser muy significativo. Estas actividades les permiten disfrutar de salidas que a veces abandonan y que influyen en su cuidado personal.

Acciones sencillas, como tomar un té o compartir una comida con amigos de forma regular, les brindan oportunidades para socializar, distraerse y sentirse parte de un mundo más amplio, forjando relaciones más sanas y productivas.