“Cuando las mujeres ven un rostro y cuerpo bonito sus sentidos psicológicos se activan de tal manera que sienten atracción por el chico”, explica la psicóloga Alicia Gilces. Sin embargo, se conoce que las féminas le dan más importancia a la parte afectiva que a la estética, pero ¿qué tan cierto es esto?

Los psicólogos modernos aseguran que los mecanismos de elección de pareja de las mujeres rastrean muchas señales de la calidad genética y la capacidad de los hombres para invertir recursos en la mujer y su descendencia. Una variable que predijo tanto la calidad genética del hombre como su capacidad para invertir es la apariencia física.

Una publicación en la revista científica The Royal Society titulada “Las señales de fuerza en el cuerpo de los hombres” expresa que las mujeres les otorgan un valor importante al aspecto físico del hombre.

Por lo tanto, según el estudio, las mujeres evalúan el atractivo físico del cuerpo de los hombres con un enfoque en las características que indican formidabilidad; es decir, capacidad de lucha, aptitud física, fuerza y salud general. De hecho, la investigación ha demostrado que las mujeres se sienten atraídas por los hombres con señales de formidabilidad física.

Además, la publicación matiza que las mujeres ven a los hombres altos como atractivos. Finalmente, los hombres parecen saber que las mujeres encuentran favoritismo en los hombres más fuertes; los datos transculturales muestran que los caballeros generalmente desean tener cuerpos más fuertes para atraer a las féminas.

Asimismo, las mujeres valoraban especialmente los componentes de la fuerza de la parte superior del cuerpo como la fuerza muscular y los bíceps.

Gilces acierta sobre este tipo de preferencias femeninas, pero que en “últimas instancias no hay nada escrito acerca de gustos” porque a la hora de la seducción entran en juego algunos elementos que brindan mayor importancia al momento de fijarse en los chicos.

“Tanto hombres como mujeres están ‘cosificados’. Vivimos en un mundo donde el cuerpo está endiosado y puede haber varios aspectos que cada género considere más o menos deseable. Ahora toda mujer, lo mismo que todo hombre, puede ser sensible a la estética del otro, no como antes que le era prohibido hacer comentarios sobre la figura esbelta de un caballero”, aclara Gilces.

La experta hace referencia a décadas atrás, cuando las mujeres no podían pronunciarse sobre temas sexuales. Incluso las féminas tenían prohibido mirar a los hombres. “En occidente hemos avanzado un poco sobre este tema de la libertad femenina, pero en oriente aún se sigue evidenciando casos en los que las mujeres no pueden hablar”, relata.

Sin embargo, para la psicóloga, las preferencias físicas terminan cuando las mujeres ya tienen claro cómo es su aspecto (de los hombres) en términos generales.

“Las mujeres nos preguntamos si nos convence cómo visten, su peinado, su perfume y sin olvidar los zapatos. Es muy raro que una chica se olvide la ropa que llevaba el primer día que conoció al hombre que la impresionó”, detalla.

Además de estos puntos, la terapeuta menciona que a las mujeres les importa mucho la forma en la que los chicos se desenvuelven con sus amigos; muchas veces está señal les resulta simpática y atractiva porque algunas chicas tienden a inclinarse por chicos sociables.

Para la psicóloga, la personalidad es lo que más habla de una persona más allá de su imagen, por lo que hay mujeres que valoran al sexo opuesto sin considerar algunos aspectos de su cuerpo que susciten su deseo.

“Hombres y mujeres están llamados a atraerse y esto va a depender de la manera que han sido criados y la proyección de vida a que quieren llegar”, finaliza.