La leyenda sigue vigente.Internet

La chica de la curva

Son muchas las leyendas de almas en pena que deambulan por las carreteras, pero existe una con la que más de un conductor ha quedado pasmado y con los nervios de punta: La chica de la curva. Hechos inexplicables que hasta el día de hoy erizan nuestra piel sin poder dar una explicación coherente.

La leyenda se remonta hace cuarenta años atrás en las carreteras de Majadahonda, municipio de la comunidad de Madrid. En una noche fría de invierno, con una densa neblina que cubría gran parte de la carretera, un anciano del pueblo encuentra a una joven en la carretera.

El anciano se detuvo para consultarle si necesitaba ayuda, pues hacía frío y la carretera se encontraba completamente en penumbras. La niña, con cierta calma, pero algo apesadumbrada le solicitó amablemente que la lleve a Madrid. Subió al auto y emprendieron camino.

Hasta allí, nada parecía extraño para el anciano. La joven se sentó en el asiento trasero de su vehículo, pero en un sector del camino, donde las curvas comenzaron a ser cada vez más pronunciadas, la chica comenzó a rogarle al anciano que bajara la velocidad y que tuviera cuidado. Este, sorprendido por las súplicas de la muchacha, bajó su velocidad y pudo sortear las complicadas curvas de la carretera, que se encontraban prácticamente escondidas por la neblina de la noche. El anciano, al voltear para consultar a la joven el porqué de su temor, y para agradecerle las recomendaciones de las peligrosas curvas, comprobó que nadie había en su asiento trasero.

Nadie sabe cómo murió la joven.Internet

El terror se apoderó del anciano, quien se orilló con su automóvil y comenzó a buscar a la joven por la carretera, pero su búsqueda no dio resultados. No pudo dar con ella. Simplemente esta se había evaporado como la neblina en la carretera, no había rastro alguno de ella en todo el camino.

Sin salir de su asombro, el anciano se dirigió a la comisaría más cercana a denunciar. Al llegar a la Guardia Civil y relatar el hecho, los policías le mostraron una foto de una chica, lo que el anciano respondió ¡Sí, es ella!, pero recibió una respuesta que dejaría su sangre helada: “Esta chica murió hace tres años, en esa curva de la carretera de Majadahonda”.

Desde finales de 1980 a la actualidad son muchos los conductores que aseguran haber llevado una joven que deambulaba en la carretera en las frías y oscuras noches españolas.

Nadie sabe cómo murió la joven. Algunos afirman que había muerto al volcar su automóvil, otros que fue atropellada por un camión cuando iba en su bicicleta, unos decían que era rubia y se aparecía con un vestido blanco, otros que morena y vestía de negro. Y resultaba imposible dar con el testigo directo de aquel suceso.

Aunque todos los conductores coincidían en que la joven se llamaba Eloísa.

Muchos medios se hicieron eco de la noticia como el vespertino Catalunya Exprés o la revista Blanco y Negro, pero nada se pudo comprobar acerca de la joven que aparecía en las carreteras de Majadahonda.

La leyenda sigue vigente y todo conductor sabe que en las carreteras de Majadahonda existe la chica de la curva que te ayudará a sortear los resbaladizos recovecos que - ¿quién sabe? -alguna vez se llevaron su vida.