¿Por qué gimen las mujeres en la intimidad? Es una pregunta que deja abierta muchas opciones. Por ejemplo, para ayudar a que la pareja llegue más rápido al orgasmo; para satisfacer a su hombres quien disfruta de dichos sonidos de placer o tal vez por aburrimiento a la espera de que la faena amatoria termine pronto.

Según el psicólogo, Christian Díaz, los gemidos son el resultado de una relación íntima donde se está generando placer o satisfacción, "por lo tanto es una herramienta de comunicación que usa la mujer en ese momento para comunicarse con su pareja, donde salen 'palabras sucias' que en la intimidad se suelen decir".

Un estudio publicado, en el 2011, por el periódico Archives of Sexual Behavior (publicación oficial de la Academia Internacional de Investigación Sexual), descubrió que las mujeres reportaron hacer más ruido, conocido como "vocalizaciones femeninas copuladoras", justo antes y durante el orgasmo de su pareja. Las encuestadas dijeron que se trataba de una acción voluntaria.

La sexóloga Poala Pérez, opina que, "los gemidos sirven para reforzar determinadas conductas y para guiar a la pareja durante el acto sexual".

El mencionado estudio detectó que el 66 % de las mujeres gemía en la intimidad simplemente para acelerar el orgasmo de su pareja, mientras que el 87 % restante lo hizo para aumentar su autoestima. Básicamente, concluía, en que "las mujeres gemían cuando estaban aburridas o incómodas para que el sexo concluyera más rápido”.

En este punto, se daba el caso de que podían llegar a fingir placer. "Para determinar si una mujer está fingiendo o no, el hombre debe saber que su compañera puede manipular su comportamiento para dar cierta seguridad, sin embargo, si la vocalización de sonidos no va acorde con su movimiento corporal, es decir no hace sincronía, se puede tratar de gemidos fingidos", explica la experta.

No obstante, ocurre que no siempre los gemidos son conscientes, es decir, que no todo el tiempo los podemos 'fingir' para encender a nuestras parejas, pues se trata de una respuesta normal durante las relaciones sexuales. Muchas veces los gemidos son anticipatorios del orgasmo y suelen producirse como interacción con el compañero.

Sin embargo, según Díaz, estos sonidos no tienen que estar especificamente conectados con la parte sentimental, "esto quiere decir que la mujer no necesita amar a esa personas para gemir, no tiene nada que ver".

"La vocalización del orgasmo es una forma de acoplarse a la pareja. Entre dos personas que se gustan, el deseo aumenta cuando ves la excitación del otro. Es una respuesta normal durante una relación, y muchas veces son anticipatorios del orgasmo. Los jadeos forman parte de la simbología del encuentro sexual", señala la sexóloga.

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Hay que dejar en claro que si una mujer no gime, no significa que no esté disfrutando de la intimidad. Aunque otra conclusión del estudio realizado asegura que, "tanto los hombres y las mujeres que emiten gemidos durante el sexo tienden a disfrutar más que las parejas que tienen relaciones sexuales en silencio".

Estos sonidos podrían tomarse como una 'forma de comunicación' ya que son también una manera de indicarle a la pareja que sus esfuerzos por complacernos han tenido éxito. A esto se suma el hecho de que muchas mujeres necesitan vocalizar, gritar o gemir para ayudarse a alcanzar el orgasmo.

Cuando una mujer gime, explica el psicólogo, al hombre lo hace sentir que esta manejando la situación, que su compañera está sintiendo una relación satisfactoria por su vínculo sexual, "y psicológicamente le hace sentir a él que lo está haciendo bien, provoca en él el hecho de no parar, de seguir y seguir y de mostrar su masculinidad, y de decirse a sí mismo que la está haciendo sentir al punto de hacerla alcanzar un orgasmo".

"Si me preguntas si se pude fingir un gemido, sí. Por ejemplo, las trabajadoras sexuales suelen hacerlo para provocar la eyaculación inmediata del cliente y así continuar con su labor. Si hablamos de las parejas de familia, también se puede dar el caso, específicamente cuando la relación se da más por necesidad biológica, que por afecto. Ella puede fingir, conectándose con otra realidad, para decir que no pasa, aun cuando haya problemas en esa relación", relata el experto.

Desde lo psicológico, el mejor gemido es cuando se juntan la parte sexual, la parte emocional y la afectiva. "Cuando se conectan esas tres áreas sale a relucir el mejor gemido, hasta provocar un orgasmo placentero", sostuvo Díaz.

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