Tradicionalmente las bandas de pueblo han sido parte de las celebraciones de la fundación de Cuenca, en cada abril. Pero al igual que el año pasado, una vez más, debido a las restricciones por la pandemia de la COVID-19, los morlacos no podrán bailar públicamente con estos grupos que los ponían a disfrutar en cada aniversario.

Esta tradición se afianzó hace cinco años con una docena de grupos artísticos que, convocados por un concurso anual organizado por Unión de Periodistas del Azuay y el Amistad Club, rendían homenaje a la ciudad. El evento fue como una forma de revalorizar las celebraciones populares. Ahora, las presentaciones de las bandas están en pausa.

Hasta abril de 2019 participaban una doce agrupaciones conocidas en la provincia azuaya, algunas de las cuales tienen entre 80 y hasta 108 años de existencia.

Este 12 de abril, por los 464 años de fundación de Cuenca, solo dos bandas animarán el sencillo acto que será trasmitido a través de redes sociales desde el mercado 12 de Abril.

Para Paola Orellana “es una pena no poder dar el espectáculo acostumbrado”. Ella es trompetista de la única banda de pueblo femenina del Azuay, Las Pioneras del Austro, conformada por doce artistas que también extrañan sentir el calor y euforia del público. Pero por el cuidado de la salud y la vida de las personas se están adaptando a la virtualidad, que ha ganado terreno como herramienta de comunicación y difusión en esta época de restricciones.

Herencia de pueblos

Eliécer Cárdenas, cronista de Cuenca, explicó que las bandas de pueblo nacieron en diferentes poblaciones andinas, donde agricultores o artesanos que interpretaban instrumentos de viento o percusión, los empleaban para alegrar, hacer bailar y animar a sus comunidades. Esta forma de entretenerse la pasaron a las siguientes generaciones.

En registros constan que esta cultura musical era popular a inicios del siglo XVIII, cuando organizaban fiestas, reuniones y en estos actos no faltaban los hombres que ejecutaban sus instrumentos de viento y percusión.

En Cuenca, según el historiador, hasta los años 50 y 60 existieron unas 30 o 40 bandas, las cuales eran requeridas para poner el toque musical en procesiones religiosas, cortejos fúnebres, festividades cívicas, de barrios y conmemoraciones familiares y en retretas de los domingos.

En la actualidad, solo hay unas doce agrupaciones dedicadas a animar las fiestas populares, que por el momento no se pueden realizar.

El grupo fue bautizado como Las Pioneras del Austro y doce féminas de entre los 9 y 35 años de edad manejan un repertorio bajo la dirección de Jorge Pichaicela.

Ellas optaron por seguir el oficio de la música que desempeñaban sus padres, quienes en su momento fueron parte de algunas agrupaciones, según contó Paola Orellana. (JM)