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Buena Vida
Crónicas del cuarto rojo: ¿Qué se te viene a la mente con ‘gymsutra’?
La fantasía y el erotismo se volvieron parte de mis ejercicios a través de las poses aprendidas
Confiesen, chicas… Muchas cosas que nos han vendido en las publicidades para mejorar nuestro físico nos quitan demasiado tiempo, dinero y algunas de esas son demasiado drásticas, al punto de pasar por el quirófano.
Mi sexóloga, en cambio, es más práctica. Para ella el sexo puede ser el mejor deporte y es lo que me sugiere las veces que llego a consulta por un tema.
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La ‘receta’ tiene un punto a favor pues en la vida he hecho alguna rutina con máquinas. ¡Nunca! Y no me miren raro. Lo más cercano a ejercitarme ha sido bailar en zapatillas de punta por más de diez años. Pero los trajes ya no me quedan y el ballet quedó a un lado.
Y allí es cuando mi sexóloga aparece como la voz de la conciencia a explicarme todo su bagaje, sobre las cosas que puedo hacer y que no requieren que invierta mucho dinero sino que son pequeños trucos y hábitos pueden ayudar a tener el cuerpo 10/10 como cuando tenía mis ‘ticinco’.
Y así es como me habló del ‘gymsutra’. Mi rostro se hizo como un signo de interrogación, pues al parecer es una práctica popular, e incluso ya hubo un programa llamado así en los canales para adultos.
Y como me gusta compartir lo aprendido en consulta, traigo el significado para los que también quieren entrenar a toda ‘máquina’.
La palabra en sí hace referencia a la unión entre gimnasia y Kamasutra. Pues el sexo, además de placentero, puede resultar ser un aeróbico y servirte para entrenar el cuerpo. Esto es gracias al Kamasutra, que es mucho más que posiciones sexuales. ¿No lo sabías? Cualquiera de sus posturas permiten alcanzar la plena satisfacción física y mental.
Así es como podemos meter un toque picante a la relación sentimental. ¿Me funcionó? ¡Ya me descargué el libro hindú! La fantasía y el erotismo se volvieron parte de mis ejercicios a través de las poses aprendidas. Tampoco se trata de hacerlo como una playboy si no quién sabe y termine dislocada en emergencias.
Hay que empezar con las sencillas. Al ojear el libro te puedes encontrar con poses como ‘El elefante’ en donde ejercitas piernas y zona lumbar o ‘La yegua’ que permiten trabajar cuádriceps, los músculos de la espalda y los brazos. Para las más arriesgadas están las poses ‘Chakrasana’ o ‘Universo’. Nada más, cuidado se caen y arruinan el ‘delicioso’. Al fin, una tendencia que sirve para conectar y beneficiar el cuerpo. ¡A entrenar!
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