Lo han repetido hasta la saciedad, pero vale hacerlo una vez más: mientras mejor se coloque el condón, más efectivo será.

Los cuadernos de sexualidad en el colegio y las charlas universitarias no mienten: el condón brinda 98 % de efectividad para prevenir embarazos y enfermedades de transmisión sexual, según la página internacional de Planificación Familiar.

Aunque ya en la práctica, lo precisa el mismo sitio, su efectividad es del 85 % porque humanamente no somos perfectos y ponerlo no resulta tan sencillo como las instrucciones del empaque dicen.

Hablar de su uso o simplemente comprar uno puede significar todo un reto. Conscientes de esa realidad, Fundación Desafío tiene disponible en su portal una guía llamada Hablemos de Condones. Es decir, esas pequeñas fundas de látex pensados para el pene y la vagina son los protagonistas.

Ya sea condón masculino o femenino, hay recomendaciones que para ambos coinciden, como las siguientes

- Ninguno es reusable.

- Siempre hay que mirar la fecha de caducidad.

- Jamás utilizar uñas y dientes para abrirlos.

- Por prevención es mejor llevar uno siempre, pero no en la billetera ni expuestos a la luz solar.

- Añadirle extras como lubricantes, vaselina, aceite de bebé perjudica el látex y podría debilitarlo hasta que se rompa.

- A diferencia del condón masculino que necesita que el pene esté erecto, el femenino se puede colocar hasta 8 horas antes de mantener relaciones sexuales.

En las farmacias y supermercados los hay de todas las marcas y sabores. El costo mínimo es de $ 2,80 en adelante, dependiendo de sus propiedades.

Ya para tener clarísimo como ubicarlo en tus partes íntimas, puedes revisar la guía aquí.