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La pequeña productora, Ruth Juanacio, cultiva la fruta en menos de una hectárea pero le alcanza para mantener su negocioCortesía

En el Austro, a la uvilla ya no le hacen el feo

La fruta, que no era muy apetecida, hoy 'endulza' el porvenir de productores en una zona rural de esa región del Ecuador

La uvilla, conocida también como uchuva, aguaymanto o ushun, es una fruta de una planta herbácea que, además de tener un delicioso sabor agridulce, ostenta entre sus propiedades el ser un adelgazante, antiparasitario, diurético, prostático, premenstrual, antigripal, entre otros beneficios.

Ruth Juanacio y su esposo, Moisés Macancela, le han dado un voto de confianza a la uvilla. Ellos la cultivan en la parroquia Guapán, del cantón Azoguez, Cañar, una provincia del austro, región en la que la fruta no ha sido muy apetecida.

Con la asesoría de técnicos del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), esta pareja de emprendedores sembraron la fruta en un cuarto de hectárea, donde cosechan semanalmente 200 libras, las cuales son colocadas en el mercado local y en el Azuay.

Jugos, mermeladas...

El sueño de Juanacio y Macancela es producir a gran escala y que su producto sea conocido por ser ecológico, ya que el cuidado de las plantas , perteneciente a la familia solanaceas, lo realiza de manera responsable.

“Nosotros empezamos un cultivo nuevo sin saber si nos iría bien o mal, pero agradecemos el interés que ha puesto el MAG en nuestro emprendimiento y gracias a ello hemos salido adelante poco a poco", dice la mujer, quien produce también mermelada, jugo y barras nutricionales a base de las semillas de la uvilla.

"Con el tiempo queremos realizar la deshidratación de la fruta para poder comercializarla en seco”, anunció la productora.

Buscan la certificación

Juanacio agregó que están en el proceso para obtener la certificación de Buenas Practicas Agrícolas, BPA, que otorga la Agencia de Regulación y Control Fito y Zoosanitario (Agrocalidad), porque el objetivo es que el producto sea exportado.

Al respecto, Javier Freire, director de Agrocalidad, explicó que el proceso de certificación de este cultivo en Buenas Prácticas Agrícolas está en marcha desde hace algunos meses.

La uvilla se puede comer sola o en mermeladas y jugos.Cortesía

“Nosotros brindamos todo el apoyo necesario, junto al técnico del MAG, a los propietarios de este cultivo para que en el menor tiempo posible puedan obtener la certificación BPA, que les ayudará a mejorar su producción, la calidad y por supuesto las oportunidades de comercialización”, precisó el funcionario.

No era muy consumida

Raúl Medina, técnico del MAG, señaló que la gente no está acostumbrada a consumir uvilla y por eso a los productores les ha tocado informar sobre los beneficios de la fruta para introducirla al mercado local. Indicó que ahora supermercados y tiendas del Austro la venden en sus locales.

Moisés Macancela, el esposo de Ruth ya está convencido de los  beneficios de esta fruta para el ser humano: “Posee propiedades nutricionales importantes -recalca-.

Reconstruye y fortifica el nervio óptico; elimina la albúmina de los riñones; ayuda a la purificación de la sangre. Es ideal para quienes tienen problemas con la diabetes, acotan los entendidos en este alimento.