Jessica Quezada mira desconsolada como las rocas siguen cayendo e ingresan a su propiedad. Este es el tercer deslave que se presenta en el sector de la Esperanza, en el cantón Alausí. Es que las constantes lluvias siguen afectando a la provincia de Chimborazo, especialmente al sistema vial.

Las vías que conectan a Riobamba con la región Costa, así como con el Austro, presentan deslaves y derrumbes en varios sectores. Este fin de semana la carretera Riobamba-Cuenca se cerró por tres ocasiones debido a deslaves en La Esperanza, en Alausí, y en Joyagshi en el cantón Chunchi.

“Tenemos miedo, a las diez de la noche comenzaron a caer las piedras más pequeñas y enseguida se vino abajo”, indica Jessica.

Las lágrimas brotan cuando recuerda que hace apenas siete meses, junto a su esposo, se endeudó en más de cien mil dólares para comprar el terreno y maquinaria, y poner una lubricadora y vulcanizadora en la carretera al ingreso del cantón.

“No hay cómo trabajar, de esto nos manteníamos, era el futuro de mi familia, ahora no tenemos nada”, indica entre sollozos.

Las grietas se hacen cada vez más grandes, atraviesan su terreno y continúan por la de sus vecinos. Las cabinas y paredes están totalmente cuarteadas, una pequeña construcción donde funciona su dormitorio y cocina, son el refugio para cuatro personas, dos adultos y dos niños de apenas 7 y 4 años, no ha dejado el sitio, pese a que le indicaron que se habilitó un albergue.

“Si me voy cuánto tiempo me tendrán, los alquileres están carísimos, de un cuarto me pidieron 100 dólares, con qué pago”, se cuestiona.

El miedo es latente, todas las noches su esposo junto a 18 familias más del sector bajo se turnan para hacer guardia y dar la voz de alerta en caso de que la montaña se venga abajo.

Según Luis Valdez Uquillas, esposo de la presidenta del sector, tres familias son las únicas que decidieron abandonar su vivienda por miedo a quedar sepultadas. “Esperamos que ya hagan algo, nos dicen que se va a hacer trabajos para evitar una desgracia, pero aquí seguimos viendo cada vez brechas más grandes, la misma carretera, los obreros limpian, rellenan y está cada vez más asentada” indicó.

Según Rodrigo Rea, alcalde del cantón, ya se entregaron los estudios por parte de la Escuela Politécnica del Litoral, donde la inadecuada evacuación de aguas servidas, así como las aguas lluvias, además de una falla geológica han provocado esta emergencia “Nos da mucha preocupación, hay mucha gente que ha hecho su vida, tiene negocios, viviendas, estamos ya preparando la construcción de alcantarillado. Así como una planificación para contener las laderas, pero con la naturaleza nunca se sabe, y la presencia constante de lluvias estos días, complica la situación”, afirmó.

De la misma forma, en la vía Riobamba Pallatanga, los deslaves siguen presentes, en la zona donde hace 20 días fallecieron 4 mujeres de una familia, se presentó un nuevo deslave que terminó de destruir lo que quedaba de la vivienda, y cerró la carretera por más de 12 horas.

Al momento la vía está habilitada, pero bastante afectada.