“En ninguna parte se puede estar seguro, venimos en busca de tranquilidad y paz, en Guayaquil da mucho miedo salir. Queremos estar en la playa y olvidarnos por estos días de lo que está ocurriendo”, comentó Nelson Albán, quien junto a su familia llegó a Olón, provincia de Santa Elena, al inicio de este feriado por las festividades del 2 y 3 de noviembre de 2022

Él y sus acompañantes fueron de la minoritaria concurrencia de turistas en el primer día de asueto a este balneario.

Y entre quienes llegaron a Olón, pocos decidieron salir en las noches a pasear por el malecón como se vio en otros feriados.

MIEDO A SALIR

Similar situación ocurrió en Salinas. Luego de merendar, la noche del jueves 3 de noviembre de 2022, muchos de los visitantes optaron por retirarse a sus hoteles o viviendas vacacionales.

El cuencano Luis Cifuentes paseó un rato por el área artesanal del sitio y luego de comprar algunos recuerdos en paja toquilla y balsa decidió retirarse a su residencia, en Costa de Oro. “También hay delincuencia aquí y es mejor estar en casa. No queremos pasar malos ratos”, dijo el visitante.

En Montañita hubo farra, pero la concurrencia fue baja. En la conocida Calle de los cocteles, de las más visitadas durante la noche, hubo locales vacíos.

“Está como un fin de semana normal, no parece feriado. Los hechos delincuenciales afectan al turismo y comercio”, indicó el negociante Leonardo Borbor.

PREOCUPACIÓN

La poca presencia de visitantes durante el primer día y noche de este tiempo de descanso hizo que se diluyeran las expectativas que tenían los comerciantes y diferentes operadores turísticos. Esperaban unos 200.000 turistas, pero no han llegado ni la mitad.

Según la Cámara de Turismo de la provincia de Santa Elena, en el feriado de noviembre del 2021 cuando estaban aún vigentes las restricciones por la COVID-19, la ocupación hotelera alcanzó el 90 %. En este 2022, cuando han levantado las limitaciones, apenas llega al 40 %.

Empresarios turísticos atribuyen la poca presencia de turistas a los hechos violentos generados por la delincuencia. “La gente siente temor de salir de sus casas y prefieren quedarse junto a su familia, pocos son los que se arriesgan. La violencia criminal afecta de manera directa al turismo y comercio”, señaló Luis Hidalgo, administrador de un hotel.

Se espera que este sábado 5 y domingo 6 de noviembre de 2022, por los espectáculos artísticos con cantantes internacionales, lleguen más visitantes.