A la espera de una fuerte lluvia, para llenar los reservorios de agua. Así se encuentran varios moradores del sector Las Terrazas, en Durán. Esto porque desde finales del mes de diciembre, el fluido del líquido vital potabilizado que suministra la Empresa Municipal de Agua Potable de Durán (Emapad-EP) es bastante deficiente, aseguraron los habitantes.

Ellos han tenido que invertir en material y mano de obra para colocar canaletas que recogen el agua de la lluvia que cae sobre sus techos. Felícita Plúas, moradora de Las Terrazas, señaló que ella y varios vecinos han gastado alrededor de 350 dólares para colocar las canaletas.

“Esta semana llovió fuerte en dos ocasiones en Durán. Esos días aprovechamos para llenar dos cisternas. Esa agua la utilizamos para lavar, cocinar y realizar las demás cosas en las casas”, contó Felícita.

Pero la noche del pasado jueves, los habitantes de este populoso barrio no soportaron más y salieron con carteles y quemaron llantas en las calles para reclamar por la falta de agua.

“Ya estamos cansados de que jueguen con nosotros. Nos dan agua solo un momento. Y para variar, no llega con fuerza”, se quejó Jesús Moreira.

Joffre Peñafiel, otro morador, agregó que él vive en la parte alta del cerro y que para poder coger un poco de agua tiene que poner dos bombas de succión. “Hace una semana casi me muero. Chupando la bomba para poder tener agua me atoré. Los vecinos tuvieron que darme los primeros auxilios, me estaba poniendo morado”, contó Joffre.

Él añadió que no solo moradores de Las Terrazas tienen este problema en Durán. “En la ciudadela Maldonado, parte de El Recreo, Los Helechos y así muchos sectores más”, precisó.

Por su parte, el gerente de Emapad, Cristhian Mendoza, aceptó que existe deficiencia de agua potable por tubería en ciertos sectores de Durán. “Esto se debe a que desde enero, tres de las cinco bombas de succión, que están en los pozos de Chobo, estaban dañadas. Una ya fue reparada. Esperamos solucionar los problemas con las otras dos bombas”, afirmó el gerente.

Según Mendoza, habría que invertir unos 100 mil dólares. “Tenemos que adquirir las bombas y por la pandemia hay retraso en el mercado. Luego hay que instalarlas. Por lo pronto, estamos realizando suministro asistido de agua mediante tanqueros a los sectores que tienen problemas”.

Agregó que otro problema es que muchos moradores de Durán no pagan las planillas de agua. A la mayoría de hogares solo se les factura “un valor simbólico de aproximadamente 5 dólares y pese a eso no pagan. Específicamente en el sector de Las Terrazas existe una deuda de 40 mil dólares entre planillas desde hace 10 años”, afirmó Mendoza.

María Guamán, habitante de Las Terrazas, señaló que le parece absurdo que lleguen planillas. “¿Tenemos que pagar por un servicio que nos dan tres veces por semana y de manera deficiente?”, cuestionó.

La doctora Maritza Reinoso, especialista emergencióloga, explica que el agua de las lluvias que caen en las grandes ciudades no es recomendable para el consumo humano.

“Las fábricas que existen en las ciudades envían humos tóxicos al ambiente y estos se juntan con las nubes y al llover esos químicos caen nuevamente”, indica la profesional de la salud.

Recalca que hervir el agua de lluvia no ayuda a eliminar esos tóxicos. “Podrán morir las bacterias, pero los químicos seguirán en el agua. Almacenarla en reservorios es peor, porque esto hace que los microorganismos y químicos se acumulen más”.

Recomienda a la ciudadanía que consume el agua de las lluvias, que si presentan dolores estomacales, diarreas y deshidratación busquen de inmediato ayuda médica, porque podrían tener emergencias de alto riesgo.