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Los moradores actuaron por su cuenta luego de que una menor de edad fuera atacada por el sospechoso.Cortesía

Quito: Lo que pasó con el presunto delincuente golpeado y quemado por una barriada

Investigadores revelaron información de este caso, el cual ha generado conmoción en la capital del Ecuador. Conozca los detalles

Un presunto delincuente al que le dieron ‘paloterapia’ y le prendieron fuego en Carapungo, norte de Quito, se recupera de sus quemaduras y heridas en una casa de salud. Está en condición crítica. La policía informó que la noche del viernes 2 de junio de 2023, el sujeto, de 34 años, habría ido junto a un compinche en una motocicleta para atracar a los habitantes de la zona.

Los sospechosos, al parecer, habían atacado a una adolescente para robarle su celular. Uno de ellos le habría roto la cabeza con una botella de vidrio para intentar quitarle el celular y otras pertenencias. Los habitantes del sector, al ver el hecho, se juntaron en grupo y alcanzaron al atacante, mientras el otro delincuente huyó en la motocicleta.

Alrededor de cincuenta personas atacaron al presunto delincuente, según las fuentes policiales.

Una ‘madriza’

Los vecinos le ‘dieron hasta para llevar’. Le cayeron a puñetes, patadas, lo golpearon con palos, tubos. Incluso, algunos de ellos le ‘estamparon’ la cabeza contra el suelo. “Ya no voy a hacer eso. Perdóname”, gritaba el presunto ladrón y suplicaba que no lo golpearan. Durante un momento se quejó de que le partieron una de sus costillas.

“Perdóname ni la v...”, le respondió uno de los moradores mientras grababa la agresión. Otros decían que todavía no llamaran a la Policía “porque ellos le defienden”. Y continuaron con la golpiza. Entre tanto, una vecina le reprochaba el ataque que cometió en contra de la menor, de 15 años, a quien custodiaban otros moradores y curaban la herida que se le abrió en el cráneo.

“A las mujeres les robas, pero a los hombres no haces nada”, decía la señora. Otros habitantes le increpaban el por qué no se dedicaba a trabajar en lugar de robar a la gente. “Nosotros nos levantamos a las 06:00 para tener nuestras cosas”.

Parecía que todo se calmó cuando un vecino le dijo: “Te voy a perdonar, pero quiero que nunca más vengas a robar aquí”. Sin embargo, este le roció combustible, sacó un fósforo y le prendió fuego. El sujeto gritaba desesperado del dolor y trataba de apagarse el fuego, pero los moradores no le permitían y le seguían golpeando. “Que te quemes por perro”, le decían.

Los policías llegaron al sitio y apartaron a la multitud enardecida, salvando de la muerte al presunto delincuente. Lo llevaron a él y a la víctima a un hospital cercano, donde se recupera de sus heridas. Hasta el cierre de esta edición no se presentó una denuncia formal en su contra.