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Después de la fiesta en una vivienda del barrio Jaime Roldós, hubo lamentos y dolor.Joffre Lino

A Pulpo lo ‘agarraron’ ‘plutote’

La víctima había llegado el último día del año pasado, para recibir el 2021 junto con su madre, y disfrutaba con unos amigos cuando lo atacaron

Una venganza o intento de robo serían las causas por las cuales asesinaron a Julio Toala Chilán, a quien conocían como Pulpo, quien disfrutaba de una rumba de nuevo año, en una casa del barrio Jaime Roldós del cantón La Libertad.

Transcurría el 1 de enero de 2021 y en la vivienda disfrutaban al compás de la buena música, bailaban y gritaban: “¡Viva el Año Nuevo!”.

La rumba se extendió hasta las 16:00. A esa hora, de manera inesperada, ingresaron a la casa tres encapuchados armados. Uno de ellos disparó a Pulpo y terminó con la rumba.

Un disparo de arma de fuego en el tórax del lado izquierdo apagó la vida del ciudadano, quien quedó tendido en medio de la sala.

Mientras el cuerpo fue sacado, los familiares consolaban a la madre de la víctima.Joffre Lino

El bullicio de la fiesta se apagó. Los demás fiesteros entre mujeres y hombres gritaban aterrorizados, algunos de estos quedaron en estado de shock al ver a su amigo en el piso bañado en sangre. Tres detonaciones alarmaron al vecindario.

Se especula que los atacantes habrían esperado a que el grupo, que se había extendido en la celebración, estuviera en estado etílico para actuar.

Consumado el hecho, los tipos salieron a la carrera y abordaron un auto, en el que los esperaban en una esquina.

VERSIONES

Investigando el asesinato, los agentes policiales receptaron las versiones de quienes estuvieron en la escena del crimen.

“Investigamos las causas que provocaron este asesinato, las personas presentes no están en sus cabales debido a la ingesta del alcohol y se contradicen, por eso cuatro de estas serán llevadas al Ministerio Público para que allí rindan sus versiones”, informó el fiscal Wagner Sellán.

La policía tiene dos hipótesis: que pudo ser venganza o tal vez un intento de robo, aunque los malhechores no se le llevaron nada a la víctima.

No puede ser que estés muerto, Julio, mi hijo querido. Me prometiste que venías a recibir el nuevo año conmigo y me cumpliste, no creo que te hayan matado”, gritaba entre lágrimas una mujer, quien según testigos era la madre de la víctima. (JL)