La prescripción de deudas es una opción legal que permite eliminar las obligaciones financieras bajo condiciones específicas y después de un período determinado. En otras palabras, ofrece al deudor la posibilidad de no pagar lo que debe de manera legal, siempre y cuando, después de transcurrido el tiempo estipulado, solicite formalmente la prescripción ante un juez, quien deberá emitir un fallo al respecto.

(Te invitamos a leer: Juegos Paralímpicos: Kiara Rodríguez gana su segunda medalla de oro) 

Sin embargo, hay casos en los que no es posible acogerse a la prescripción de la deuda. Por ejemplo, si la entidad financiera o la tienda a la que se debe ha iniciado un juicio de coactiva o ha comenzado un proceso de negociación de la deuda, el deudor no podrá beneficiarse de la prescripción.

El abogado especializado en temas de deuda, César Coronel Garcés, vocero de la plataforma Defensa Deudores Ecuador, explica a EXTRA que se puede aprovechar la situación cuando la citación al deudor no se ha llevado a cabo de manera correcta. “Por ejemplo, si se han omitido requisitos formales, no se entregó la citación en el domicilio del deudor, o, aunque se realizó en el domicilio, no se fijó correctamente la boleta”, señala el experto.

Aprovechando esos errores, el deudor puede emprender una acción legal para impugnar la citación, lo que podría abrir la posibilidad de acogerse a la prescripción de la deuda.

Sin embargo, si la citación es correcta, el deudor tiene otras alternativas, como verificar si la deuda está respaldada por documentos válidos. “Esto ocurre frecuentemente con deudas al Estado o a compañías de telefonía, que a veces carecen de un respaldo documental adecuado. Si se solicita una copia del contrato y no se presenta, la deuda debería ser eliminada”, explica el experto.

Otra opción alternativa a la prescripción es la renegociación de la deuda, señala Coronel. Este proceso puede llevarse a cabo antes, durante o después de un proceso judicial.

Antes, se refiere a situaciones en las que el deudor ha estado en mora durante varios meses sin que la entidad lo haya demandado. En tal caso, el deudor puede intentar renegociar la deuda, por ejemplo, buscando una condonación parcial de intereses, explica Coronel.

También es posible negociar durante el juicio. Es decir, si el deudor ha dejado de pagar y ha sido demandado, puede intentar negociar la deuda directamente ante el juez. “Si ya está demandado, no negocie por fuera, solo ante el juez, porque cualquier negociación externa con la entidad a la que debe, sin el conocimiento del juez, podría ser perjudicial para el deudor. No siempre trabajan juntos el departamento legal y el de cobranzas”, agrega.

(Te invitamos a leer: ¿Se controlaron los incendios forestales en Quito?)

Después del juicio, también es posible llegar a un acuerdo de negociación. Según el especialista, en algunos casos, incluso después de haber iniciado un proceso de insolvencia, la persona puede alcanzar un acuerdo. En otros casos, se ha logrado revertir el proceso de coactiva y la sentencia.

Lo recomendable, señala el entrevistado, es que los deudores busquen realizar cualquiera de estos procesos con el apoyo de asesoría legal.

Para seguir leyendo EXTRA sin restricciones, ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!