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Pozos someros salvan a agricultores en la cordillera Chongón-Colonche
Excavaciones cerca de los afluentes alientan al agro. Las escasas lluvias han hecho que tengan que formar los reservorios
Los cambios climáticos les juegan una mala pasada a los agricultores que tienen sus tierras en la parte alta de la cordillera Chongón-Colonche. Antes, los campesinos mantenían sus plantaciones con aguas de las lluvias que caían de manera continua. En las dos últimas décadas, las precipitaciones han disminuido, lo que causa estragos a los agricultores.
Con el agua de los pozos someros, que son excavaciones junto a los afluentes, se riegan aproximadamente mil hectáreas de cultivos de las parroquias Colonche y Julio Moreno. Para construirlos se apoyan con tractores. En lo que va del año ya se han realizado unas setecientas excavaciones al pie de los afluentes.
Los riachuelos, por la falta de lluvias, permanecen secos la mayor parte del año y, según estudios, el agua se encuentra en grandes cantidades a poca profundidad.
Por la falta de recursos económicos y técnicos, algunos cultivadores estaban a punto de abandonar el campo porque no contaban con estos pozos.
Omar Núñez, del área de fomento productivo del Consejo Provincial, coordina las actividades de excavación para salvar la agricultura en estas áreas. El funcionario explicó que con la ayuda de maquinaria pesada, el accionar ha sido más eficiente y con mejores resultados.
“Si bien es cierto, algunos agricultores por sus propios medios habían penetrado la tierra en busca de agua, con los equipos que tenemos en la entidad se facilitó la labor y en pocos metros de profundidad encontramos los manantiales para tener líquido en gran cantidad”, manifestó el funcionario.
En los sectores Ceibitos, El Corozo, Sube y Baja, Las Balsas, entre otros, la actividad agrícola se ha retomado gracias a los pozos someros, que dotan del líquido indispensable para mantener vivas las plantaciones. Los comuneros continúan en la producción de maíz, maracuyá, papaya, plátano y yuca.
“Ahora que tenemos los pozos, nuestra vida seguirá en el campo. Aunque los tiempos han cambiado y las lluvias al alejarse nos han traído algunos problemas, con la capacitación técnica que recibimos vamos saliendo adelante”, comentó el campesino Gonzalo Neira.
La cimentación de pozos someros en la Península también se extiende a las zonas donde se cultivan cítricos. Estas son las localidades de Sinchal, Barcelona, Loma Alta y Sitio Nuevo. El objetivo es que no dejen de producir.
“Teniendo agua, las plantas se van a mantener. Es verdad hay zonas que han levantado su producción agrícola por el trasvase, pero no hay que olvidarse de los sitios a los que no llega el agua mediante aquel sistema. Mantener los pozos someros es la solución”, recalcó el técnico agrícola Freddy Pozo.